El Consejo de Administración de Proaguas Costablanca ha aprobado esta mañana reducir un 25% el precio de venta de las viviendas de Protección Pública que la sociedad promueve en la localidad. Asimismo, se ha acordado establecer un sistema de alquiler con opción a compra sobre estos mismos inmuebles construidos en las calles La Mancha nº 48 y Comparsa Marinos nº 3 de la localidad.

El objetivo de estas medidas es fomentar la compraventa de las viviendas ajustando el precio de las mismas a los existentes en el mercado, lo que supone en torno a un 25% por debajo del precio máximo legal establecido para el término municipal de Petrer. De esta forma, las viviendas de un dormitorio con una plaza de garaje y trastero pasarán a costar 55.000 euros de media frente a los 75.000 actuales, mientras que las de tres habitaciones se rebajarán de los 145.000 a los de 109.000 euros.

El sistema de alquiler con opción a compra, por su parte,  se extenderá por un periodo máximo de cinco años y con unos precios que oscilarían entre los 300 y los 500 euros al mes en función de su superficie y tipología. Con el objetivo de fomentar la venta de las viviendas, si el cliente ejecuta la opción de compra antes de finalizar el tercer año de arrendamiento, se le aplicará el descuento del 25% establecido para el régimen de compraventa. Asimismo, la sociedad ha fijado un tratamiento más beneficioso con respecto a las rentas mensuales a pagar por el arrendatario en caso de optar a la compra de tal manera que en caso de ejercerla el primer año se aplicaría el descuento del 100% de las cantidades entregadas, el segundo año del 95%, el tercer año del 90%, el cuarto año del 80% y el quinto año del 70% de las cantidades abonadas.

Un ambicioso proyecto que se ha torcido por completo

En julio de 2009, el Ayuntamiento de Petrer y Proaguas -sociedad pública participada íntegramente por la Diputación de Alicante- establecieron un convenio urbanístico por un coste total de 12 millones de euros que contemplaba la construcción de 90 Viviendas de Protección Pública y la realización de zonas verdes -de hasta 90o metros cuadrados- en diferentes zonas del municipio. El proyecto, el primero de estas características en el que se embarcaba el organismo provincial, pretendía regenerar una parte degradada de la ciudad: el entorno de la calle Andalucía.

Si bien la rehabilitación del barrio, se dijo, era el mayor interés del consistorio (el plan salió adelante con la conformidad de todos los grupos políticos), el proyecto de expropiar y construir era deficitario y se buscaron fórmulas para hacerlo rentable. La solución del ayuntamiento fue ceder tres parcelas de terreno a Proaguas, dos en la zona de El Campet -calle Comparsa Marinos- y otra en la Canal -calle La Mancha-. Todo este proyecto debía durar tres años.

Las expropiaciones comenzaron y más tarde también las demoliciones en la calle Andalucía; antes se finalizaron las viviendas en El Campet y la Canal, de las que se publicitaba su alta demanda. Comenzaron a venderse en febrero de 2011; más de un año y medio después, en octubre de 2012, sólo se había vendido una. La situación económica y los precios de las viviendas, que no eran los propios de protección oficial sino que venían marcados por el mercado, hicieron atrás a todos los compradores. Ese alto precio es el que hoy ha sido rebajado.

La iniciativa del alquiler con derecho a compra que hoy se ha hecho oficial, por cierto, ya fue planteada por el PSOE, que presentó dos mociones a la Diputación y al Ayuntamiento en las que se instaba al organismo provincial a ofertar  casas vacías,  en régimen de alquiler con derecho a compra para jóvenes. Una iniciativa que no vio la luz al no ser respaldada por los populares. Eso fue a principios de 2012.

Por su parte, las obras de la calle Andalucía, que habían sufrido diversos problemas, se quedaron en la primera fase: se derrumbaron varios inmuebles y se han quedado los solares. Este verano, el Partido Popular, con el rechazo de toda la oposición, decidió paralizar oficialmente las obras por dos años, prorrogable en otros dos.