El zapatero global

Periplo en México

Aquel adolescente estaba comenzando, sin ser consciente de ello, una próspera carrera en el calzado que le convertiría, muchos años después, en un hombre de mundo. “Estuve trabajando en Joaquín Bernabéu como jefe de producción durante cerca de 23 años. En 1994 contactaron conmigo porque había un mexicano que tenía una gran empresa en México y que quería un técnico español para cambiar los sistemas de producción. Me hizo una gran oferta de trabajo y me fui allí, en calidad de asesor de producción”. De este modo José Luis abandona Petrer y España para lanzarse a la producción internacional.

Con el país de los dos “golfos” (entiéndase, el de California y el de México) como punto de partida de nuestra conversación, José Luis reconoce la importancia de las experiencias vividas, no solo en el ámbito personal, sino también en el profesional. “Supuso una gran experiencia vital. Yo asimilé en México métodos o detalles referidos al calzado que nunca se nos habían ocurrido aquí, igual que me sucedió más tarde en Asia. La lección más importante que descubrí fue que cuando vas a un sitio nunca debes pensar que eres el mejor, lo fundamental es que al mismo tiempo vayas a aprender. Y yo he aprendido muchísimo”.

José Luis nos ilustra con diferentes ejemplos de los detalles de producción que agilizaban todo el proceso y se aplicaban ya por aquel entonces en México, como es el sistema de forrado de tacones, que traspasó aquí a su vuelta. “Allí al tacón no se le daba brocha, sino que se le aplicaba cola por inmersión. Se colocaban en un soporte, por ejemplo, 50 pares de tacones, que se sumergían en cola y después se dejaban escurrir. Después se forraba el tacón, se lijaba y se hacía el perfilado completo y se quedaba el zapato perfecto, cosa que se está haciendo aquí ahora también. Eso yo lo aprendí en México en los año 90”.

Producción en los gigantes asiáticos

Tras tres años en México, “sin saber nada de inglés y mucho menos de chino”, el zapatero se embarcó en su particular aventura asiática, cuyo primer destino fue China. Durante cuatro años dirigió el negocio Petrer 92 en la fábrica Selena, teniendo a su cargo a 6.000 trabajadores.

José Luis en la Gran Muralla.
José Luis en la Gran Muralla.

“Allí no tienes que ir a abrir ninguna fábrica nueva, simplemente contactas con  la gente y contratas una de las ya existentes. Todo el desarrollo y el diseño del zapato se hace en Petrer. Una vez que el cliente tiene la colección, se mandan desde aquí los componentes y se desarrollan en el otro lado del mundo”, nos cuenta sobre la producción asiática.

Fábrica de zapatos en el país más poblado del mundo.
Fábrica de zapatos en el país más poblado del mundo.
Una de las fábricas de zapatos de Selena en la que José Luis ha desarrollado su labor.
Una de las fábricas de zapatos de Selena en la que José Luis ha desarrollado su labor.
Fachada de la fábrica.
Fachada de la fábrica.

Un sistema de trabajo que, aunque suscita las críticas de muchos, José Luis defiende. “Llega un momento en que tienes que irte fuera, es necesario para la empresa. Has de intentar que tu negocio no muera y si tienes que marcharte para que aquí pueda funcionar, no te queda otra alternativa. Nosotros somos conscientes de que estamos haciendo algo en Petrer porque estamos haciendo zapatos allí. No puedes decir: “me muero aquí”. En cambio, sí podemos sobrevivir aquí y podemos vivir allí. Es importante cambiar la mentalidad y saber que en otras partes también saben hacer zapatos. Es más, en todo el tiempo que llevo en el calzado, nunca un cliente se ha quejado de que se ha roto un tacón o se ha despegado una suela”.

Nuestro protagonista (a ver si aciertan a verlo) con algunas de los encargados de sección de la fábrica de China
Nuestro protagonista (a ver si aciertan a verlo) con algunas de los encargados de sección de la fábrica de China

Este imperativo del que habla José Luis es el mismo que provocó su traslado de China a Vietnam hace cuatro años, algo que él describe como “un paso natural”. “En China hace dos años empezaron a subir los precios y tuvimos que buscar otro mercado. Europa le impuso un antidumping a China y el precio se incrementó (el antidumping suponía un veintitantos por cien más), de modo que hubo que moverse a Vietnam. Muchas empresas se vieron obligadas a hacer lo mismo”.

4 thoughts on “El zapatero global”

  1. magnifico reportaje sobre Jose luis y sobre la deslocalización de la industria del calzado en Petrer en este mundo globalizado.
    Muy interesante.

  2. Una aclaracion para el reportaje, Jose Luis NO CONDUCE LA MOTO , porque es totalmente imposible, es una aventura por los miles de motocicletas que conducen habitualmente. Creo ha sido un error de impresion.

  3. Tengo que decir, compartiendo el dia a dia con Jose Luis, que es una gran persona, profesional y particularmente. Y si conduce moto, despacio pero conduce cada dia

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