Métodos para el estudio de la fauna (I)

Estación de espera:

Consisten en la observación directa mediante el acecho en zonas con amplio campo visual. El acecho consiste en permanecer oculto, cerca de un paso previamente conocido y a la espera a que los animales circunden la zona.

La espera nos permite observar cualquier especie animal siempre y cuando conozcamos sus costumbres y necesidades con anterioridad. Es aconsejable la utilización de atrayentes como puede ser la comida o el agua. En función de la alimentación que aportemos es posible observar unas especies u otras (sardinas o cebo vivo para carnívoros o rapaces, cereales para herbívoros y granívoros, etc.) Puede llevarse a cabo cerca de guaridas o madrigueras donde sepamos que están utilizándose; en los senderos cabe la posibilidad de observar especies diferentes aunque es en las charcas, fuentes, abrevaderos o zonas de baño donde encontramos puntos de especial interés.

Las imágenes que compartimos en la publicación están en su mayoría captadas de manera directa, desde los hides o escondites que mantenemos desde la publicación y que el lector habitual ya conoce.
Las imágenes que compartimos en la publicación están en su mayoría captadas de manera directa, desde los hides o escondites que mantenemos desde la publicación y que el lector habitual ya conoce.
Casi todos nuestro escondite, como este de La Solaneta, consta de una charca para la fauna. Como muestra esta imagen, el agua se heló tras la reciente nevada.
Casi todos nuestro escondite, como este de La Solaneta, consta de una charca para la fauna. Como muestra esta imagen, el agua se heló tras la reciente nevada.
La perdiz, captada desde uno de nuestros hides.
La perdiz, captada desde uno de nuestros hides.

El mejor momento para el acecho se produce al amanecer y atardecer, coincidiendo con el momento de alimentación y baño de los animales, siendo primordial anticiparse y esconderse en el punto de espera antes de estas horas con el fin de que los animales no detecten movimientos raros y sospechosos por la zona (por ejemplo el cauto tejón puede permanecer horas en la entrada de la tejonera si sospecha un olor nuevo en el ambiente).

Es necesario tomar unas ciertas precauciones:

La manera más adecuada de observar es situarse a sotavento, es decir, en la dirección contraria a la que (aunque ligerísimo) sople el viento  para evitar que el olor a «humano» que se desprende pueda ser percibido (Un truco por ejemplo consiste en colocar algún tipo de ropa vieja usada por nosotros cerca del atrayente, así conseguimos que nuestro aroma vaya resultando familiar a los carnívoros a observar). Es forzoso vestirse de manera acorde con el medio, con colores crípticos y de forma cómoda, con zapatillas de goma, colores neutros, evitando llevar medallas, cadenas, colonias, desodorantes… A la hora de andar por la zona de observación es necesario caminar por suelos donde haya hierba o musgos, con paso ligero y elástico, sin producir ruidos ni vibraciones ya que estas se extienden por el suelo aunque para nosotros sean imperceptibles, evitando las ramas y la hojarasca. Por último es imprescindible armarse con una gran dosis de paciencia.

Es necesario pasar lo más desapercibido posible siendo común el uso de elementos de camuflaje como redes o tiendas de campaña que, a la vez de aumentar los movimientos en su interior y dificultar la detección de nuestra presencia de la fauna, permite mayor comodidad en días de frío o lluvia

La Asociación Amigos del Valle de L´Avaiol ha perfeccionado esta técnica hasta un punto sublime con la construcción de varios observatorios preparados para tal fin. Dentro de estos refugios es posible pasar inadvertido gracias a la colocación de «cristales espía», los cuales permiten la visión por parte del observador mientras que en el lado opuesto se refleja la imagen, impidiendo la visión del interior del observatorio. Quedan integrados paisajísticamente de una manera perfecta y en su interior existe el espacio necesario para aumentar la comodidad.

El inestimable esfuerzo de la Asociación Amigos del Valle de L´Avaiol, con el aporte permanente y constante de comida, junto con la construcción de puntos de agua próximos (creados para tal propósito), ha conseguido acercar la fauna salvaje a estos puntos estratégicos permitiendo su observación de la manera más eficaz y efectiva posible.

Estación de Escucha:

La estación de escucha se basa en la emisión de sonidos de reclamo en puntos prominentes de amplia sonoridad. Este método resulta muy cómodo y práctico en la actualidad pues los nuevos sistemas de audio permiten por un lado mejorar la calidad de los sonidos y, por otro, disminuir el tamaño del equipo y facilitar su portabilidad. La reproducción de los sonidos se realiza en simples discman o teléfonos móviles acoplados a pequeños altavoces.

Es posible atraer a un carnívoro mediante un reclamo imitando el conejo o el ratón con el chillido que emiten estos animales cuando están heridos. Otros reclamos pueden ser los sonidos de los animales en la época de celo, ya que algunas especies al ser territoriales, buscarán al intruso que ha penetrado en su área para expulsarlo. Este método resulta especialmente interesante para muchas paseriformes (carboneros, herrerillos, petirrojos, etc.), que se acercarán para desplazar de su territorio al intruso, o para las estrigiformes (rapaces nocturnas), dada su difícil observación.

Es importante ser muy prudente con la utilización de reclamos en la época de celo, debido a que podemos estar introduciendo en el territorio de cría de un macho un competidor con un canto mucho más fuerte y prolongado que el suyo. Un abuso en la utilización del audio puedo acarrear problemas en las relaciones de parejas reclamadas e incluso la ruptura de las mismas. Esto es así debido a que el macho territorial cree que no puede competir con este nuevo macho (artificial) o bien, que la hembra abandone a su actual pareja o sus crías tras un moderno móvil de última generación.

La manera correcta de utilizar este tipo de reclamos para aves consiste en conectar el audio durante cinco minutos, mantener el silencio durante otros diez y volver a repetir el proceso dos o tres veces más. En el momentos en el que el método es efectivo y vemos que se acerca el pájaro, desconectamos el audio y únicamente lo volvemos a poner en marcha para mantener la presencia del animal por las inmediaciones, con un audio más corto y con un volumen más bajo.

La fecha que mejores resultados produce el reclamo en rapaces nocturnas comienza en diciembre hasta marzo, comenzando el proceso minutos antes del ocaso del sol. Para el resto de aves la mejor época comienza con el inicio de la época de celo, al inicio de la primavera y en las primeras horas del día.

En el siguiente artículo, el resto de métodos directos.

2 thoughts on “Métodos para el estudio de la fauna (I)”

  1. Muchas gracias, aunque la enhorabuena no debe ser para mi sino para quien se la merece: la Asociación de Amigos del Valle de L’Avaiol.
    Un saludo y de nuevo, gracias.

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