Al igual que ocurriera con los límites entre Sax y Petrel, del deslinde con Agost disponemos de 2 actas realizadas: la primera, el 15 de mayo de mil ochocientos setenta y uno, y la segunda , que es la actualmente vigente, del “día primero de diciembre de mil ochocientos noventa y siete”.

Ambos deslindes son  bastante coincidentes en cuanto a situación de los mojones, pero difieren en los aspectos que pasamos a comentar. Si bien ambos deslindes se iniciaron desde el mojón común a los pueblos de Petrer Monforte y Agost, en el peñón de la Mama del Cid, el de 1871 es virtual (”es la punta mas elevada del peñón de la Mama, sobre el cual no se puede fijar mojón por su posición elevada”). En el deslinde de 1897 sí se pudo fijar un mojón en la punta del peñón de la Mama del Cid: “se reconoció como tal un montón de piedras grandes, de forma cónica de un metro treinta centímetros de altura por un metro de diámetro en su base”.

La descripción del otro mojón común, el que divide los términos de Petrel, Agost y Castalla, también tiene una descripción muy precisa en ambos deslindes. La descripción del mojón, “una roca” en el primero y una “piedra irregular” en el segundo, no tiene desperdicio. Hacemos notar que en deslinde de 1871 se describe que en la roca “hay grabadas tres cruces que deben indicar la dirección de los tres términos” y se determinó que “se hiciera a punta de pico dos rayas que formaran tres ángulos en dirección a las líneas divisorias de ambos términos y del de Castalla,  y que en cada uno de los ángulos se grabaran las iniciales de los respectivos términos en esta forma P C A”  Pues bien, nosotros encontramos  las cruces, pero no las iniciales que se tendrían que haber grabado  a punta de pico.

Destacar también  en el deslinde vigente, el de 1897, la precisión del  oficial tercero del cuerpo de Topógrafos D.Fermin Morejón, jefe de la cuarta Brigada topográfica, cuyas descripciones  de los mojones y de las vistas que desde ellos se observan son muy curiosas. Por ejemplo el quinto mojón: “se reconoció como tal el centro geométrico del brocal del pozo de la llamada Casa de Abajo, que dista cinco metros y setenta y cinco centímetros del centro del batiente de la puerta de la referida Casa De Abajo”; o la descripción del segundo mojón: “caracteriza la situación de este mojón la circunstancia  de que retirándose del mismo dos metros en dirección de la Mama del Cid, deja de verse la Sierra del Ventós”.

Y finalmente señalar uno de los errores que tenían la mayoría de deslindes anteriores a los oficiales en la actualidad, como en este caso el de 1871: la falta de descripción de vistas desde cada uno de los mojones. Esta descripción de lo que se observa es esencial en el deslinde de 1897.