La crisis del agua

 

  Recursos hídricos renovables internos anuales Extracción anual Explotación sectorial %
Total Km.³ Per capita m.³ Total Km.³ Per capita m.³ domestica Industr. agrícola
Mundo 1987 41022.0 6918 3240.00 645 8 23 69

África

1995

3996.0 5133 145.14 202 7 5 88

Angola

1987

184.0 15376 0.48 57 14 10 76

Níger

1988

3.5 346 0.50 69 16 2 82

Egipto

1993

2.8 43 55.10 921 6 8 86

Europa

1995

6234.6 8547 455.29 625 14 55 31

Bulgaria

1988

18.0 2146 13.90 1574 3 76 22

España

1991

110.3 2775 30.75 781 12 26 62

Norte America

1991

5308.6 17458 512.43 1798 13 47 39

Centro América

1987

1056.7 8084 96.01 916 6 8 86

Sud América

1995

9526.0 28702 106.21 335 18 23 59

Ásia

1987

13206.7 3680 1633.85 542 6 9 85

Oceanía

1995

1614.3 54795 16.75 591 64 2 34
Pérdidas estimadas en las redes de distribución del agua suministrada
Albania Hasta 75% 1997
Armenia 50-55% 1997
Dinamarca 4-16% 1997
Eslovenia 40% 1999
España 24-34% 1998
Italia 15% 1996
Moldavia 40-60% 1995
Ucrania 50% 1995
Bulgaria 60% 1998

Fuentes:

  • – «RECURSOS MUNDIALES 2000», programa de las naciones unidas para el medio ambiente
  • – «Uso sostenible del agua en Europa» agencia europea de medio ambiente, ministerio de medio ambiente.

De sobra es conocido el tema de la escasez de agua que se sufren en ciertos países y en determinadas épocas del año. Este debate es una herida sangrante que crea polémica allá por donde pasa.

Ahora bien, todos hemos escuchado que la cantidad de agua dulce disponible, respecto del total en nuestro planeta, es una cantidad minúscula. Pero aún así es suficiente, ya que nuestro crecimiento se vería limitado antes por el alimento que por el agua.

Fijándonos en la 1º gráfica, en África el agua disponible per capita es bastante mayor que la extracción anual per capita, y lo mismo sucede en todos los demás países a excepción de Egipto ya que su principal aporte de agua es fluvial y en esta gráfica no se contempla.

Con estas cantidades de agua debería de ser suficiente el abastecimiento de agua, por lo que el problema no es la escasez de agua, sino la escasez económica que sufrimos para dotarnos de unas infraestructuras inexistentes en muchos países o en un estado deplorable.

 

 Por ejemplo, en el caso de Bulgaria, con unos recursos hídricos renovables internos por año con un volumen de 18  Km.³ (de los cuales se extraen 13.90 Km.³) nos encontramos con que del volumen extraído se pierde entorno a un 17% en las redes de distribución.

Más concretamente a principios del siglo en que nos adentramos, Cataluña perdía en las redes al año lo que consume Barcelona en el mismo periodo de tiempo. Y el hecho es que las empresas distribuidoras prefieren aumentar el caudal suministrado para abastecer la demanda en vez de reparar las fugas de agua, ya que levantar toda la red de tuberías supone un gasto de dinero elevadísimo.

Otro caso llamativo lo encontramos en Brasil. Millones de brasileños no tienen acceso al agua, y es debido a la escasez de infraestructuras y el deterioro de las mismas, a pesar de que este país alberga el 11% de los recursos hídricos de nuestro planeta.

Otros países, sencillamente por la meteorología que tienen, los aportes de agua no son lo suficiente como para mantener a la población. A pesar de ser la especie humana una plaga de lo más cosmopolita, no somos capaces de expandirnos en ambientes tan extremos.

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