El PRIM-Centro quema. Como una patata caliente se la han pasado de una mano a la otra y han soplado. Pero sigue quemando. Y eso, al parecer, no sólo les pasa a los partidos que en su momento pasaron el rodillo sobre las alegaciones presentadas y ahora se rasgan las vestiduras porque la Comisión Territorial de Urbanismo ha desestimado el PRIM-Centro. También le quema esta patata caliente al director de El Carrer que no publicó una carta que sobre este tema envié como miembro de L@s Verdes. Otros medios de comunicación sí lo hicieron y, además, con interés.
Nuestro partido emitió un comunicado donde recordábamos que L@s Verdes presentamos una serie de alegaciones en el año 2007, cuando se aprobó el PRIM-Centro. Justamente lo que ahora ha provocado su desestimación por la Comisión Territorial de Urbanismo ya lo alegamos en su momento Los Verdes: exceso de alturas, exceso de densidad constructiva, escasez de espacios verdes, y a ello sumamos el escaso respeto hacia el patrimonio histórico y urbano heredados.
¿Porqué este silencio mediático de El Carrer con L@s Verdes en torno al PRIM-Centro? Tal vez sea porque somos el único grupo político que desde sus inicios nos opusimos a la devastadora acción que se pretendía con este plan. El PRIM-Centro se considera un documento decisivo para el crecimiento urbanístico de la ciudad de Petrer, pero no todo crecimiento urbano significa desarrollo y bienestar social. Menos aún cuando las actuaciones urbanísticas están muy lejos de una ciudad ecológica y socialmente sostenibles. Poner en valor el centro histórico no significa hipotecar la actuación municipal con una gestión del territorio que prioriza la construcción antes que a las personas y a la ciudad heredada.
Ni caso a nuestras propuestas. El pleno municipal de Petrer aplicó el rodillo. Ahora vemos que el Ayuntamiento erró. Fue un error político mayúsculo. Los responsables de este plan fracasado son los que en el 2007 no se opusieron claramente a un modelo de ciudad donde se seguía apostando por un crecimiento urbanístico desbocado, arrasador del suelo, del patrimonio histórico y de las zonas verdes. El PRIM-Centro ha hecho aguas por este error político.
Ahora resulta que no han sabido cocinar debidamente el PRIM-Centro. Pero sigue la patata caliente. ¿Qué va a hacer nuestro alcalde Pascual Díaz con ella? ¿La va a volver a esconder como ha hecho estos años pasados? Sería una media muy equivocada, como lo fue su elaboración y el uso demagógico que hizo del PRIM-Centro. Las patatas calientes hay que cocinarlas debidamente y para ello deben contar con L@s Verdes, que ya les dijimos que este PRIM-Centro así no colaba. La patata caliente que tiene Pascual Díaz debe cocinarla con todos los agentes sociales, ciudadanos y políticos de Petrer, para hacer de nuestra localidad una ciudad más humana, social y ambientalmente sostenible. ¡Que no se quede cruda en el horno! Y El Carrer debe cocinar sus noticias y colaboraciones sin sesgos parciales y propagandísticos como ha hecho en este caso.
No debe extrañarnos lo de el Carrer, pues bien sabemos quien es u director y para qué lo pusieron ahí. Mucha foto del alcalde cuando inaugura un pantano, disculpen, cuando inaugura una obra de cemento o cunado chupa cámara en cualquier acto social. En otros casos se esconde el alcalde y envía a sus segundones.