La comunidad educativa del Instituto Poeta Paco Mollá se ha concentrado esta mañana a iniciativa del profesorado en las puertas del centro para protestar por las políticas de recortes sociales y educativos que están llevando a cabo desde Gobierno de la Comunidad Valenciana.
La concentración ha tenido lugar a partir de las 13:45 y ha contado con la participación de cerca de un centenar de personas, entre padres, profesores y alumnos. La intención es repetir cada semana este encuentro, al igual que ya hacen otros centros educativos de Elda y Petrer e insistir en su rechazo a los recortes.
Los manifestantes lamentan además la entrada en vigor del decreto del 5 de enero del Consell el pasado 1 de este mes, por el cual se rescinden los contratos del profesorado interino a partir del 30 de junio, “lo que supone un agravio laboral para los trabajadores de la enseñanza y también pedagógico para la organización que significa para la finalización del curso y el comienzo del siguiente.”
Además, los profesores denuncian que, con estas medidas de recorte, el ratio de alumnos por aula puede alcanzar los 40 alumnos en la ESO, y supondrá la eliminación de diferentes programas educativos “que empeoran la atención personalizada del alumnado (compensatoria, refuerzo, desdobles, PAE, etc.)”
Igualmente, el decreto ordena que no se harán sustituciones de bajas laborales del profesorado si no hay más de dos profesores de baja, lo que afecta gravemente a la actividad docente y didáctica.
Me imagino que la concejala de educación, profesora en ese mismo centro, no se habrá solidarizado con sus compañeros.
Pues es una lástima que no se sumen todas, ya que nos están dando a los trabajadores por todos los lados. No sólo como maestra, también como madre de escuela pública, como usuaria de los centros de salud públicos, como ciudadana que usa las bibliotecas o asistía a las actividades culturales. Todo, todo está siendo recortado por los de siempre. Esos que se lavan las manos después de todo el mal que han hecho, tal cual pilatos. Son unos irresponsables.
A lo mejor la concejala de educación no se siente trabajadora. Eso va por familias.