Cerca de un centenar de estudiantes se ha congregado esta mañana en la Plaza del Ayuntamiento de Elda para mostrar su rechazo a los recortes en el sector educativo emprendidas por el Gobierno central. Convocados por el recién creado síndicato estudiantil Front Estudiantil de les Comarques del Sud (FECS), que nació hace apenas un mes en los municipios eldense y petrerense, los alumnos de secundaria se han plantado en este punto céntrico de la localidad con pancartas con las que han dejado patente su oposición a estas medidas que consideran un paso agigantado hacia «la precarización de la escuela pública». En el resto del país también se han producido concentraciones como parte de las acciones promovidas en los tres días de huelga de los estudiantes universitarios y de Secundaria.

Oposición apoya el movimiento

Junto a los estudiantes, en la concentración se han podido ver otras caras conocidas de políticos de la oposición en Petrer, como el edil de EU, Javier Martínez, que ha acudido acompañado por la secretaria del grupo Susana Peinado, así como al concejal del Bloc, David Navarro. Los socialistas también han mostrado su apoyo a esta protesta, valorando especialmente que hayan sido los sindicatos estudiantiles y las asociaciones de padres los que se han movido para hacer factible estas acciones reivindicativas.

Al finalizar la protesta, un representante del sindicato ha leído un manifiesto trasladando las denuncias del colectivo a los distintos organismos oficiales competentes, y que les ofrecemos a continuación:

«¡No a la destrucción del sistema público de enseñanza!»

«Desde el Frente Estudiantil de las Comarcas del Sur, y en colaboración con las distintas organizaciones estudiantiles de todas y cada una de las naciones dentro del Estado Español, queremos dar a conocer al estudiantado, y a la opinión pública en general, nuestro más amplio rechazo a las reformas que se han planteado desde el gobierno de turno, y especialmente a los recortes en educación planteados por el ministro de educación Wert.

Del mismo modo, nos gustaría incidir en que todas estas medidas se están llevando a cabo con la ayuda de los diferentes gobiernos de las Comunidades Autónomas y Forales, eludiendo sus responsabilidades. Están aplicando las decisiones del Gobierno Central sin ningún tipo de reparo, demostrando, una vez más, que bajo el capitalismo y el autonomismo no es posible la soberanía de los pueblos que se encuentran indefensos ante las reformas impuestas desde la Unión Europea y el gran capital.

Recortes, reformas, y disminución de derechos sociales, políticos y culturales, son el pan de cada día de todos los estudiantes de nuestros pueblos. Con la excusa de una crisis, creada por los mismos que están gestionando el poder desde los diferentes marcos gobernantes, nos están llevando a un sistema esclavista, donde los ricos son más ricos y los pobres son más pobres; donde los nuevos faraones tienen nombres de multinacionales, y donde, con el total acuerdo de los gobernantes y la patronal, siguen fatigando a esa clase oprimida mediante los nuevos látigos que son las fuerzas represivas del estado.

No bastaba con la mala situación de las lenguas y culturas de los pueblos, sino que ahora buscan destruirlas (españolizarlas) recortando los presupuestos en educación, cultura y en la mejora de la situación lingüística. Justifican todo esto diciendo que no hay dinero, cuando en los mercados de alta gama el crecimiento ha aumentado, así como en el gasto militar y los sueldos de los políticos. No hay dinero, y sin embargo, se financia con dinero público la construcción de aeropuertos peatonales o la visita de altos cargos religiosos.

Cada vez vemos en las escuelas más cámaras y más personal de seguridad privada, al tiempo que tenemos que escuchar que hay que aumentar el número de estudiantes por aula y que los profesores deben ejercer más horas lectivas, sufriendo estos últimos, no solo la precariedad en su puesto de trabajo, sino también el paro, siendo casi 50.000 los profesores y profesoras interinas despedidas con motivo de los recortes, y además viéndose atacados por unos medios de comunicación que los pintan como vagos e incompetentes.

Todo esto nos lleva a un camino de precarización de la enseñanza pública, siendo mínima la calidad con la que se están impartiendo las clases, por hechos como la masificación en las aulas, la falta de profesorado, los barracones en lugar de aulas o la supresión de iluminación y calefacción.

No podemos dejar de lado el proceso privatizador que está afectando a los estudios superiores universitarios, ya que, a día de hoy, una cantidad considerable de compañeros y compañeras no pueden acceder a una carrera debido a su nivel adquisitivo, la subida del precio de las tasas universitarias y el endurecimiento del acceso a las becas.

Tampoco el proceso mercantilizador, la intrusión de las empresas y los bancos en la organización universitaria, que nos lleva al trato del estudiantado como mero objeto de mercado y mercadería, destrozando el derecho de la universidad a decidir libremente y condenando a los estudiantes a las decisiones de los poderes financieros.

Aun así, ya que no tenemos nada que perder, solo hay que decir que ¡nos queda todo por ganar! Es la hora de conquistar un modelo de sociedad justo y equitativo, donde el poder resida de verdad en el pueblo, donde no sea posible destruir fuentes de riqueza colectiva como la educación.Para ello, vemos como única salida ejercer la soberanía de cada pueblo. Esa soberanía que nos hace ser sujetos en todos los procesos y no simples objetos de compra y venta, y a estar condenados a ser espectadores sufridores de los desoladores acontecimientos. Día a día desde cada centro educativo, debemos luchar contra cada medida impuesta desde el Gobierno y buscar las alternativas necesarias para lograr nuestros objetivos. Uniéndonos a las luchas por una educación pública y digna para todas y todos, para poder construir la nueva escuela que nos eduque como personas libres. Solo siendo sujetos activos de los procesos educativos seremos capaces de construir otro modelo de escuela y sociedad.

En ese camino, la única alternativa posible es una escuela pública, laica, democrática, antipatriarcal, digna y que cumpla con todas las necesidades lingüísticas y culturales de cada nación. En este camino, invitamos a todo el estudiantado de las respectivas naciones del Estado Español a que luche en este cambio junto a nosotros. Somos dueños de nuestro presente y tiene que ser nuestro compromiso, para construir nuestro futuro, ¡Es tiempo de luchar! ¡Con la lucha estudiantil lo conseguiremos!

¡Hasta la victoria siempre!»

Front Estudiantil de les Comarques del Sud.