Otro día aprendiendo del saber tradicional y de la alimentación de calidad que proponen los comerciantes del Mercado La Frontera, en el año de su vigésimo quinto aniversario.

‘Paqui, frutas y verduras’

Saludados por una imponente cesta con los productos seleccionados de la semana, el cliente va a encontrar en la caseta frutas y verduras de todas clases, incluyendo, por ejemplo, dátiles, tomates secos o setas silvestres de temporada. Roberto nos cuenta que él apuesta por la calidad: «ahora han proliferado muchas fruterías  en el pueblo y la gente se desengaña, porque a lo mejor por diez euros te dan cinco bolsas pero al llegar a casa tienes que tirar tres».

«Y luego está, claro, el trato personal», se sonríe, «tengo clientas que me piden también que les coja la carne y el pescado. Incluso, en clientas de muchos años, me dan la llave y se lo pongo en la nevera». Confirmando esas palabras, interviene Mari, una clienta que se siente «familia», y que sintentiza con acierto lo que le lleva acercarse a la frutería de Paqui todos estos años: «Es que te sientes a gusto».

‘Carnicería  Vicente Albert’

«Variedad de carnes y elaborados, pinchos, al ajillo, con pimentón, con una salsita que hacemos nosotros, empanados, tortolitos…», Vicente enumera algunas de las especialidades de la carnicería que dirige, situada en una de las entradas del mercado y siempre muy animada. Los clientes hablan del día a día o de la próxima compra mientras hace florituras con la carne, trocéandola de una decena de modos distintos, y sugiere algunos platos para estas fiestas. «Pues mira, sin complicarte, una piernecita al horno de cordero lechal, con su romero, con su manteca, en su jugo, pues es un plato buenísimo para estos días», nos recomienda a nosotros.

«La ternera viene de Galicia, muy tierna y sabrosa; el cerdo, de Teruel, muy bueno, no suelta agua…» Le pedimos un último consejo, general, para comernos estos manjares: «Te doy uno, para el filete. La sartén bien caliente, y el aceite y la sal sobre la carne en crudo».