Petrerense 0 – 0 Rayo Ibense

Nuevo empate del Petrerense, el cuarto seguido, ante un rival al que no pudo hincar el diente en la primera parte y al que debió ganar en los instantes finales del encuentro, cuando el equipo marró dos ocasiones clarísimas. No obstante, el Rayo Ibense vino como líder y demostró ser un buen equipo, por lo que es un punto justo, que no obstante no sirve demasiado al Petrerense, quinto por la cola y todavía sin conocer la victoria.

El partido no empezó bien para los intereses locales, de las primeras veces que se vieron superados en juego y dominio territorial. Los ibenses salieron muy bien plantados y desconectaron todo el circuito de juego local, que estuvieron muy incómodos y no llegaron al área rival en todo el primer tiempo (no digamos ya tirar). Por el contrario, el Petrerense se aplicó en defensa y no concedió demasiadas ocasiones, aunque la más clara del Rayo Ibense la meten nueve de cada diez veces. Esta fue la excepción y se fue al palo.

La segunda parte vio poco a poco un cambio de escenario. El Petrerense optó por abandonar un poco su estilo de toque y, motivado también por los cambios, buscó un fútbol más directo, que se mostró efectivo. Gradualmente, el empuje pasó a ser de los locales, que sin mucha claridad fueron creando algunas ocasiones. Animados por el público, con un apoyo en las gradas que no recordaban ni los más veteranos del lugar (la nueva directiva ilusiona a la afición), el Petrerense se fue creciendo y asedió la meta rival en los últimos cinco minutos de encuentro. Miguelico remató de chilena a la salida de un córner en lo que hubiera sido el gol de la jornada, y a Pedro Rico le sacaron un tiro en la línea en el tiempo de añadido.

Este sábado, a las seis de la tarde, el equipo se desplaza a Monóvar para un derbi vecinal de máxima rivalidad. Se espera un partido tenso, pero el Petrerense debe superar la presión ambiental para conseguir empezar a sumar de tres en tres.