La temporada pasada y tras un gran inicio, venciendo a algunos de los equipos más fuertes, la Unión Deportiva Petrerense se vino abajo a mitad de la competición y acabó sufriendo para mantener la permanencia, firmada en el penúltimo partido. Antonio Rubio ”Campello”, uno de los entrenadores más preparados y respetados de la división, amenazó a finales de la temporada pasada que si seguía en el equipo haría una revolución. Ha seguido y vaya si lo ha hecho: sólo siguen nueve jugadores del año pasado y hay 13 incorporaciones nuevas.
“El año pasado, aunque se consiguió el objetivo, que era la permanencia”, explica Campello, “creo que se pasaron apuros innecesarios, y que pudimos dar mucho más. Por eso, este año, hemos buscado imprimir lucha, ilusión y motivación en la plantilla, y creo que lo hemos conseguido, además sin mermar la calidad que ya había en la misma”. Entrando en nombres, de la plantilla del año pasado han quedado Pablo, Pedro Rico, Raúl Gómez, Víctor Hugo, Coti, Marcos, Reca, Murcia y Claudio, y del juvenil se incorpora Juan, que ya jugó algunos partidos el año pasado con el primer equipo. Las nuevas incorporaciones afectan como es lógico a todo las posiciones, y quedan así, comenzando por la defensa: Mito (portero del Eldense B), Mariano (defensa, viene del fútbol base eldense y éste es su primer año amateur), Plaza (defensa que estaba en el Albatera), Pablo “Pope” (defensa del Eldense B), Abel (central que viene del Torrellano), Corbí (lateral izquierdo del Eldense B) y Gustavo (otro lateral izquierdo procedente del Torrevieja de tercera división). Al centro del campo se incorporan Uri, veloz extremo que estaba en el Alicante en tercera división, y los mediocentros José Alejandro, que viene del Eldense en Tercera División, y Alex Gras, del Eldense B, así como Marcos Alendaño “Cabrera”, mediapunta que viene del Santa Pola, y Miguelico, delantero centro que el año pasado militó en el Eldense B. En total, 23 jugadores, plantilla cerrada.
Este impresionante trabajo de reclutamiento es obra de Campello, “como todos los años, afortunadamente, y a pesar de que incluso este año se han reducido las ya simbólicas nóminas respecto al año pasado, el club me da manga ancha para negociar con los jugadores que me interesan. Y éstos, por su parte, ya saben lo que hay, así que si vienen es conociendo las condiciones y a dar lo máximo”. Campello gasta 200 euros de teléfono en junio y julio realizando llamadas, “algunas salen y otras no, pero este año estoy contento y creo que si nos respetan las lesiones y tenemos un poquito de suerte, estaremos en la pelea por el ascenso”. El míster también ha podido elegir jugadores en la semana de pruebas que organiza el club en verano, y que este año interesó a más de 40 aspirantes: “la criba es siempre difícil, porque tienes tan sólo unos días para valorar a muchos jugadores y te puedes equivocar”.
Se acerca la temporada
A poco más de diez días para que empiece la competición (sábado 18, a las seis de la tarde en el Barxell), Campello, que lleva entrenando desde finales de julio, espera que esta pretemporada sirva “para coger fondo y tono físico, pero sobre todo para acoplar e integrar a tantos nuevos jugadores”. También es tiempo de que los futbolistas asimilen la táctica y el estilo de juego del equipo, “que no variará mucho porque creo que los principios son irrenunciables. En todo caso, hemos ganado en versatilidad, y podemos plantear partidos con los extremos más abiertos, que son muy rápidos, o buscando el remate de cabeza con la incorporación de Miguelico, que es un delantero muy fuerte y corpulento ”.
En cuanto al calendario, Campello también se muestra satisfecho “porque tenemos tres partidos fuera de casa seguidos, que en la segunda vuelta afrontaremos en casa. Además, los campos de la Vega Baja, los más difíciles de afrontar, los tenemos a mitad de temporada”. Para el entrenador, que dirigirá al equipo en su cuarta temporada en la división, los rivales más difíciles van a ser “el Catral, que se ha reforzado muy bien, Hondón, que mantiene el bloque y se ha reforzado con alguna incorporación destacada, y el Callosa, que el año pasado, aunque no les funcionó del todo, hicieron un gran equipo a base de talonario”.
Finalmente, y aunque anunció que no seguiría, Campello volverá a coordinar el fútbol base, “con equipos que creo que este año serán más competitivos. El juvenil está en segundo año y viene rodado y con experiencia, no debería sufrir tanto como el año pasado en el que también se coqueteó con el descenso; en cadete también tenemos un equipo competitivo y en infantil lo que hay que buscar es que los niños jueguen y disfruten”.