Acusados hoy mismo por el PSOE de rendirse en la defensa de las perentorias reformas que el sector educativo necesita en Petrer -esencialmente las reformas en los centros de Virrey Poveda y en el Azorín, prometidas hace más de un lustro, y la creación de una tercera escuela infantil-, la concejalía de Educación ha recogido el guante y en la siguiente rueda de prensa ha anunciado la creación de un decálogo de condiciones básicas para la construcción y puesta en marcha de una nueva escuela infantil de gestión privada en el municipio. Este decálogo detallará los objetivos que deben cumplir las empresas o cooperativas gestoras del proyecto y serán expuestos en el tablón de anuncios del ayuntamiento y en el BOP. Según ha explicado la edil del área, Mari Carmen Chico, se abrirán plicas con el procedimiento administrativo legal para que cualquier interesado en el proyecto pueda optar a él durante los próximos 20 días.
Este pliego de condiciones no pasará por el debate y la votación del pleno, e ignoramos si incluye algunas de las alegaciones que realizaron los partidos de la oposición al primer borrador del proyecto. Este procedimiento, después de prometer lo contrario, fue criticado recientemente por el BLOC: «el PP crea un documento extraoficial que no pasa por debate y votación; no entendemos por qué no pueden seguir los mecanismos de transparencia». Los grupos de la oposición, según ha explicado la edil, se enterarán de estas condiciones en la próxima Junta de Gobierno Local.
En todo caso, el centro de la polémica es que el consistorio concede los terrenos públicos para su construcción y puesta en marcha -a 40 años- a una escuela que será de gestión privada con «precios privados», por decirlo así. Este hecho ha sido duramente criticado por todos y cada uno de los grupos de la oposición –PSOE, IU y BLOC– en multitud de ocasiones. En todas sus réplicas, como también ha hecho hoy, Chico de Guzmán ha defendido la legitimidad de una escuela infantil privada, y ha recordado que la educación infantil no es obligatoria por Ley, pero que se ha de promover la construcción de este tipo de centros, “aunque no haya obligación, nuestra intención es ofertar este tipo de plazas para que se cubra la gran demanda que hay”. Asimismo, ha explicado que la promoción de este tipo de educación pasa por las ayudas que la Conselleria da a estas Escuelas Infantiles, como actualmente son las del bono-infantil en ‘Els Peixos’ y que rondan los 75.000 € anuales para un centro que acoge 91 niños.
Sea como fuere, casi dos decenas de infantes se quedan sin plaza pública año tras año, y para el ayuntamiento es la oportunidad de ofrecer ese servicio. No obstante, la edil ha advertido que “si después de los 20 días de publicación del decálogo, hay interesados en el proyecto se iniciará el procedimiento administrativo correspondiente. Pero si no hay interés no se iniciará el proyecto”.