LA UNIÓ de Llauradors se ha mostrado satisfecho de las óptimas condiciones que ha obtenido la cosecha de aceituna, finalizada hace escasos días. Gonzalo Cots, secretario comarcal de El Comtat, comarca predominantemente olivarera, ha realizado un análisis del comportamiento de la cosecha dependiendo de la zona productora.
Así, en el Vinalopó Mitjà es donde se ha producido más merma de cosecha debido a los fuertes efectos de la sequía registrados en esta zona. Por su parte, en el Alt Vinalopó se ha observado una reducción de kilos del 50% de lo habitual. «En cifras, se han recogido unos 5 millones de kilos”, indica Cots. En la zona Norte, Alcoià i El Comtat, se ha registrado una reducción del 30%. «Hay zonas con variedades más rústicas donde la producción ha sido mayor, no obstante otras variedades como las denominadas blanqueta y manzanilla han sufrido mucho más puesto que son variedades muy delicadas. En este caso, la reducción ha sido de un 40% de media”, indica el secretario. En general, en El Comtat, comarca eminentemente olivarera, se ha recogido una producción de unos 7 millones y medio de kilos.
En cuanto al rendimiento del aceite, LA UNIÓ ha observado una producción muy buena, “dos puntos por encima de lo normal, debido a la sequía”. Aunque resulte extraño, “la falta de agua provoca en la aceituna que la proporción de aceite sea mayor y alcance mayor rendimiento”, revela.
En cuanto a la calidad del aceite “es muy buena porque al final de la campaña, cuando el fruto madura, ha habido buen clima: ha llovido y ha helado justo cuando ya estaba prácticamente recogida”, manifiesta el secretario comarcal de El Comtat. Por lo que se refiere a las plagas, “la incidencia de la mosca, que suele provocar acidez en la aceituna, ha sido inapreciable”, lo que ha repercutido en una mayor calidad.
Por su parte, el precio de la aceituna “ha subido un 80% respecto al año pasado, que fue muy bajo. No obstante, sigue siendo un precio mínimo en rentabilidad”, lamenta Cots. La subida del precio de este año también viene condicionada “por la falta de producción de otras zonas tradicionalmente olivareras, donde este año no ha habido cosecha”.
Algo remarcable que ha observado LA UNIÓ es que “los aceites a granel salen a mejor precio que los embotellados, debido a la comercialización del mercado internacional”, comenta. El aceite embotellado va dirigido, en su mayoría, al mercado nacional; mientras que el aceite a granel se dedica a la exportación. “Siempre había registrado un precio inferior, pero este año, por el contrario, se ha notado un fuerte incremento”. No obstante, “se observa una tendencia firme y se espera que siga subiendo algo más”.
Lo que preocupa a LA UNIÓ a partir de ahora es la incertidumbre que amenaza al sector para el próximo año. El cultivo ha sufrido mucho, sobre todo, en zonas donde ha habido una producción mayor, ya que los arboles han trabajado más. Por el contrario, donde la producción ha sido escasa, siempre que el clima acompañe, llueva y el árbol pueda recuperarse, se esperará una próxima campaña mejor. “La primavera y la floración tienen la clave”.
Otro aspecto que añade incertidumbre a la evolución de la próxima campaña es la nueva aplicación de la Política Agraria Común (PAC) para 2015. Para LA UNIÓ “la nueva PAC es desastrosa, ya que, además de reducir las ayudas al sector, incrementa la carga burocrática, es más enredosa y aumenta las exigencias y requisitos”.
LA UNIÓ considera inadmisible que “España mantenga el mismo presupuesto que años anteriores a repartir entre más hectáreas y más variados cultivos”. Además, una de las condiciones para percibir ayudas “es la de perdibir más de 300 euros”, por lo que las explotaciones olivareras alicantinas, que son extensiones de tierra pequeñas, quedan excluidas de estos beneficios. “Gran parte de los agricultores del sector necesitan esta ayuda para mantener sus parcelas. Sin esta aportación, muchos de ellos tendrán que abandonar sus cultivos
Por todo ello, LA UNIÓ denuncia que este tipo de política agraria “provoca el abandono de tierras, con las correspondientes consecuencias como el avance de la masa forestal, proliferación de incendios, aumento de plagas, como la del conejo de monte, etc.”