Plaza Castelar: lo que el viento se llevó
No hay mal que por bien no venga: después de padecer estas fuertes ráfagas de viento, se ha descubierto el pastel y hemos podido ver la escandalosa e innecesaria reforma de la Plaza Castelar.
No hay mal que por bien no venga: después de padecer estas fuertes ráfagas de viento, se ha descubierto el pastel y hemos podido ver la escandalosa e innecesaria reforma de la Plaza Castelar.
De momento Goliat parece que está venciendo a David, esperemos que en fechas próximas (las de las elecciones), se le pueda dar la razón al pasaje de la Biblia.
Un artículo muy crítico con la realidad actual de Elda.
El juez Garz
El sr. Rajoy nos prometió a bombo y platillo a todos los españoles lo siguiente: «La sanidad, la educación y las pensiones de los jubilados son intocables, y con la ley en mano, año tras año, mientras yo sea Presidente del Gobierno haré que no pierdan poder adquisitivo». ¡Qué promesa más hermosa! ¿Pero qué ha pasado en realidad?
Llegará un día en que dirán que tenemos la estación fantasma mejor acondicionada de España y también se harán la foto.
Bueno, dejando a un lado el capítulo de lisonjas y parabienes, vamos con otro tema que nos gustaría comentar, también relacionado con las fiestas, pero queremos llegar un poco más allá. Se trata de la limpieza o mejor dicho, de la suciedad de las calles, las aceras y las travesías cubiertas. Un tema en el que estamos implicados todos.