Los estudiantes encerrados el pasado miércoles en la biblioteca Poeta Enrique Amat niegan que obligaran a los dos trabajadores a permanecer en la sala. Así lo explica uno de los organizadores de la protesta, Fermín Amat, integrante del Front Estudiantil de les comarques del Sud, que acompaña sus palabras con un vídeo tomado al inicio del encierro: «Como nos están tachando de coaccionar a los empleados de la biblioteca, argumento en nuestra defensa: Una imagen vale más que mil palabras. Posteriormente a estas palabras, que creo, son bastante educadas y no solo respetan a los empleados sino que denuncian la precariedad de sus condiciones laborales. Se marcharon por la puerta (que no tenía candado alguno), sin el menor juicio o falta de respeto por parte de ninguno de los presentes».
En el vídeo colgado por Amat se muestra la irrupción de varios estudiantes en la sala al grito «Es mi biblioteca, la uso cuando quiero» y la explicación de los motivos del encierro así como la invitación que hace el joven a los trabajadores de la sala a unirse a la protesta. El objetivo de la acción era exigir al consistorio una ampliación del horario de apertura de los espacios públicos culturales así como una sala de estudio abierta las 24 horas del día. Pueden leer aquí la crónica.