Ya tenemos la primera muestra de «Tejiendo Petrer», la iniciativa para decorar los diez árboles de la Plaça de Baix que anunció la concejalía de Turismo a finales del año pasado. Cada uno de los árboles será decorado de un color, a base de ganchillos; este primero, en el que han colaborado más de 20 vecinos, es de color celeste, representando la no violencia y la paz (cuya efeméride es el 30 de enero). Este mes de febrero se decorará otro árbol de amarillo, representando las enfermedades raras. La iniciativa está inspirada en un movimiento cultural y medioambiental estadounidense.
Muy buena e inteligente iniciativa. Estos pequeños (en presupuestos) y grandes (en mensaje) proyectos son los que dan vida a un pueblo.