Amor. Estas cuatro letras encarnan el mensaje que el cantautor y cuentacuentos Mario San Miguel transmite en cada una de sus actuaciones. Y anoche hizo lo propio en la Tetería Las Mil y Una Noches, arropado por un entregado público que llenó, como cada actuación de los jueves la sala del local. Un espectáculo cercano que se convirtió en un encuentro del público “consigo mismo”, relata el propio San Miguel a esta publicación. “
Entre la música y el relato, entre el canto y el cuento, San Miguel, armado con su guitarra (esta vez sin su formato de banda), se subió al escenario en busca de la conciencia y de esa magia intrínseca que esconde el ser humano. «Es sencillo ser feliz. Lo difícil es ser sencillo”, reza una frase en su web.
Además de su rol como músico, este polifacético artista forma parte de un interesante proyecto llamado “El Ejército del Amor”, un colectivo que aboga por los valores humanos y gracias al cual se ha podido construir una escuela en la India con los beneficios obtenidos por la asociación con el Merchandising y demás actividades.
“Hablar del ejército del amor es hablar de pequeños compromisos inmensos, de compartir, de ayudar, de ser enseñado, de colaborar en lo que uno pueda. Agradecer lo que se tiene, repartir con otros, reconocer. Es ensalzar lo solidario, lo fraterno, la magia que nos anima y enlaza”, relata el artista.
Con dos discos a sus espaldas y un tercer en camino, Mario lleva cuatro años viniendo a la Tetería mil y una noches, un lugar donde reconoce que siempre se siente cómodo. Y junto a su banda lleva más de seis años «en la carretera». Su próximo destino será Venezuela, donde representará a España en el XVIII Festival Internacional de la Oralidad, un encuentro internacional donde se reúnen cientos de cuentacuentos.
En cuanto a todo lo que está ocurriendo en las plazas de toda España, Mario ve en ello “una semilla más” y una demostración tangible de que “se puede vivir de otra manera”. “Es una reacción que cada uno realiza desde su propia trinchera. Para mí no hay más revolución que la misma revolución”.