Anda el gobierno de Camps quejándose de las plataformas petrolíferas que quieren poner frente a nuestras costas. Que si es un grave atentado a los intereses de la Comunidad Valenciana, que si es necesario haremos una cadena humana por todo nuestro litoral para impedir que las máquinas invadan nuestras playas y perjudiquen una de las bases más sólidas de nuestra economía, el turismo.
Con los parques eólicos (que no es lo mismo, pero parecido) no hemos visto quejarse a ningún Conseller. Al revés, eramos los que nos quejábamos los que estábamos en contra del progreso de la Comunidad Valenciana.
¿Dónde han quedado los cantos de sirena de la autosuficiencia energética?
Si el Sr. Camps (entre traje y traje) era capaz de decir en enero de 2008 que los parques eólicos valencianos garantizaban el bienestar, la prosperidad y el desarrollo de la Comunidad Valenciana, no veo yo que las plataformas petrolíferas (si se saca petróleo) no puedan garantizar asimismo el bienestar, la prosperidad y el desarrollo de la Comunidad Valenciana.
Si el Sr. Camps era capaz de decir en enero de 2008 que los parques eólicos generaban riqueza y empleo, las plataformas petrolíferas también pueden generar riqueza y empleo. Con un poco de suerte nos convertimos en Kuwait.
¿Y al Sr. Cotino no se le ocurrió pedir hacer una cadena humana para impedir que las máquinas invadiesen nuestros montes y perjudicasen nuestra economía? Si en la costa hay turismo, en el interior también. Si en la costa no quieren artefactos ni maquinarias, en el interior tampoco.
No se entiende que el gobierno Camps se rasge las vestiduras ante un proyecto energético en la costa y acudan todos los Consellers a protestar y, a su vez, aliente 67 proyectos energéticos en el interior sin que atienda a los colectivos afectados y sin que ni siquiera el Director General se haya dignado a recibirnos.