Orgullosos de estar orgullosos

El pasado sábado, Madrid celebró su anual cabalgata del ‘Orgullo Gay’. Para la ocasión, la capital vistió sus mejores galas y sus mayores coloridos. Plumas, extravagancias, colores y ganas de reivindicar, este año, la igualdad transexual. Éstos arrebataron la Gran Vía madrileña para reclamar su derecho a ser vistos por el resto de la sociedad con la máxima normalidad. En esta manifestación también se dieron cita distintos colectivos de gays y lesbianas de todo el territorio nacional, así como colectivos políticos y sindicatos. Igualmente, uno de los momentos más emocionantes de este año se vivió cuando exiliados extranjeros demandaban sus derechos como homosexuales lejos de sus países de origen. En Irán, Mauritania, Arabia Saudí, Sudán y Yemen siguen siendo castigados con pena de muerte y en otros cuantos, con cadena perpetua.

Así estaba la Gran Vía.
Así estaba la Gran Vía.

orgullo_gay_2010

La manifestación partió a las 18:00 horas desde la Puerta de Alcalá, recorrió la Gran Vía y concluyó en la Plaza de España. 51.500 personas asistieron esa tarde en Madrid a la manifestación del orgullo gay según el cómputo efectuado por la empresa Lynce para la Agencia Efe. Los organizadores han asegurado que los asistentes a la concentración estuvieron en números similares a los de años anteriores, cuando manejaron cifras de más de un millón de personas, mientras que la policía y la delegación del Gobierno no facilitaron datos.

Tras la manifestación, lo que todo el mundo esperaba: las carrozas, que destilaron diversión, color, originalidad y pasión, y por supuesto con diseños y temáticas para todos los gustos, desde lo más estrambótico hasta lo más minimalista. Para deleite de los presentes José Manuel Parada subido en una de las carrozas del desfile. Al finalizar las carrozas, los asistentes tenían una cita obligada en la Plaza de España donde la cantante australiana Kylie Minogue ofrecía un ‘mini’ concierto como presentación mundial de su nuevo disco ‘Aphrodite’. Para la ocasión, los profesores del programa televisivo ‘Fama’ prepararon una coreografía del nuevo single de Kylie para que todos los asistentes la bailaran y, de este modo, sorprender a la cantante.


Un poco de historia

Llegados a este punto, ustedes se preguntarán, pero: ¿qué es eso del ‘Orgullo Gay’?. Para empezar, un poco de historia, ya que ésta es la explicación de todo lo que ocurre hoy día. El 28 de junio de 1969 la policía decidió arremeter violentamente contra los clientes de Stonewall Inn, un pub neoyorkino frecuentado por homosexuales, drags queens, travestis y transexuales. Entraron en el bar y organizaron una redada acusando y arrestando a los presentes por el único hecho de ser homosexuales. En aquellos años la violencia contra los homosexuales era común, pero el desprecio con el que la autoridad trató ese día al personal dio lugar a enfrentamientos violentos contra la desmesurada reacción de las fuerzas del orden. La situación se descontroló y fueron los policías quienes acabaron encerrados dentro del bar. Era el momento de decir basta, de dejar de ser oprimidos sin motivo. A partir de ahí comenzó una serie de protestas en contra del rechazo, el odio y la opresión constante hacia la comunidad de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales (LGTB).

El 2 de noviembre de ese mismo año se decidió tomar el último sábado del mes de junio como fecha para reivindicar los derechos de aquellos que durante años vivieron oprimidos por su condición sexual en recuerdo de ese 28 de junio. Así es como en 1970 en Nueva York tuvo lugar la primera marcha por el Orgullo Gay. Gay pride, en inglés, que también podríamos traducir al español como dignidad gay, siendo este doble significado de gran importancia para la expresión utilizada. Asimismo, orgullo (pride) es lo opuesto a vergüenza (shame) calificativo con el que con frecuencia se solía (y se suele) referir al colectivo LGTB.

En España las reivindicaciones homosexuales dieron sus primeros pasos en los años 70, tras el fin de la dictadura franquista. Pero hasta el 25 de junio de 1977 no se celebró la primera manifestación del ‘Orgullo gay’, que tuvo lugar en Barcelona, y a la que asistieron 4.000 personas. La principal reivindicación de la época era que los homosexuales dejasen de ser las víctimas de la Ley de Peligrosidad Social que les incluía en el grupo de delincuentes comunes. Hasta 1979 no se logró que esta ley excluyera los «actos homosexuales». En 1980, los colectivos y asociaciones de gais y lesbianas fueron legalizados en España y comenzó la lucha para reclamar los principales derechos fundamentales. Pronto el barrio madrileño de Chueca se convertiría en el lugar más emblemático del país en defensa de los homosexuales, cuando fue progresivamente elegido como lugar de esparcimiento y residencia de gran parte de la comunidad homosexual madrileña, y comenzar a realizar el multitudinario desfile que este año ha vuelto a ser un éxito.

Otra imagen de este año.
Otra imagen de este año.

En este día del orgullo gay se reivindica que, en primer lugar, toda persona debe sentirse orgulloso de su orientación sexual e identidad de género. En segundo lugar, que la diversidad es un regalo. Y, en tercer lugar, la orientación sexual y la identidad de género son inherentes a la persona y no pueden ser alterados intencionadamente. Esto es el punto de partida para reclamar los derechos que, a día de hoy, siguen sin aplicarse en muchas partes del mundo.


En estos momentos puedes pensar que ni te importa ni te afecta, muchos opinarán lo mismo. Hagamos un trabajo de reflexión y piensa en tu barrio, tu familia, tu trabajo o el instituto al que fuiste. ¿Existe la tolerancia que se vende en España? ¿Te sientes libre de ser tú mismo/a y coger de la mano tranquilamente a la persona a la que quieres? Al margen de si se está de acuerdo o no con la forma de celebrarlo, el Orgullo Gay va más allá de los tópicos. No se trata sólo de una fiesta, se trata de la única forma que tiene el colectivo homosexual de ser visto de la forma que se merece, con total normalidad, tanto altos o bajos, guapos o feos, sencillos o extravagantes, con pluma o sin ella.


Rompiendo tópicos

Existen muchos tópicos alrededor de la cabalgata del ‘Orgullo gay’, entre ellos, la pregunta que se hace la mayoría de la población ¿por qué ‘orgullo gay’ si no existe el día del ‘orgullo heterosexual’? o ¿por qué gastarse los impuestos de los españoles en ese carnaval? Etc. Para ello, les dejo con las preguntas y respuestas que en el blog “la invasión de las ultracerdas” daba hace un par de días:

Primera pregunta: A mí me parece muy bien todo, pero lo que no entiendo: ¿orgullo de qué? Yo soy heterosexual y no lo voy pregonando a los cuatro vientos, no hay ningún día del orgullo heterosexual.

Respuesta: Querido/a amigo/a, entiendo perfectamente tu confusión… incluso yo mismo he llegado a confundirme a veces con esto. Y es que he de comentar que la expresión «orgullo gay» (la cual sé que, voluntaria o involuntariamente, suena un tanto chulesca) no me parece una buena traducción para la anglosajona «gay pride». Quizás más apropiado sería decir «dignidad gay», pues subraya el afán de reivindicar una condición humana que, aún siendo tan digna como la heterosexual, parte de la Historia se ha encargado de ir degradando hasta el punto de hacer necesario este día. En cuanto a tu sugerencia de fomentar un «día del orgullo heterosexual», me parece de lo más válida… pero claro, si cambiáramos la expresión por esa otra que yo sugiero, es decir, «día de la dignidad heterosexual», seguramente se entenderá lo, digamos, desconcertante de tu sugerencia. Y es que, ¿no han sido todos los días de la Historia «el día de la dignidad heterosexual», a fin de cuentas? Claro que no necesitas proclamar tu heterosexualiad a los cuatro vientos: ¿acaso no se da por hecho, desde el mismo día que nacen, que todas las personas son heterosexuales? Por otro lado, no recuerdo que se haya registrado jamás ningún caso de alguien que fuera perseguido, discriminado, condenado, apaleado o incluso asesinado como resultado de su condición heterosexual. Sin embargo, se calcula que, aún actualmente, una persona gay es asesinada cada dos días en algún lugar del mundo debido a actos violentos directamente vinculados con la homofobia (si calculamos, nos da una media de unas 182 personas que son asesinadas al año por el hecho de ser homosexuales). Y eso sólo en cuanto a muertes puras y duras… pero claro, luego hay bullying escolar (por ser gay, repito, o por «parecerlo»), omisión de derechos civiles (por el contrario, las obligaciones permanecen intactas, que eso nos viene bien a todos), agresiones verbales (a nadie se le pretende ni, por descontado, se le logra insultar usando su heterosexualidad como arma arrojadiza pues, como ya he dicho, la heterosexualidad es perfectamente digna y, por tanto, sería algo ridículo). El día en que todo esto sí le ocurra a alguien por el mero hecho de no ser gay (¡que Dios quiera que nunca llegue ese día, por supuesto!), seré el primero en reclamar con urgencia que se celebre un «día de la dignidad heterosexual». Del mismo modo que sigo pensando que es necesario un «Día de la Mujer» (otro colectivo al que le han dado lo suyo a lo largo de la Historia) y, en cambio, me pierdo un poco si se sugiere un «Día del Hombre».

Segunda pregunta: Yo lo respeto todo mucho, ¿pero cómo tienen el cuajo de gastarse nuestros impuestos en ese carnaval?

Respuesta: Querido/a lector/a, entiendo muy bien tus reticencias. Es más, las comparto. Estamos en tiempos de crisis y es casi inmoral gastarse dinero en actos como este, independientemente de las sumas de dinero que a su vez mueva en los negocios locales (hostelería, ocio, etc). Además, si encima es en un acto que a ti ni te va ni te viene, pues aún resulta más indignante la situación… y claro que no me vale que parte del dinero sea aportado por asociaciones y patrocinadores.

Te entiendo, en serio, porque a mí mismo me pasa algo parecido con la Semana Santa, que aunque la respeto, también es un acto que a mí ni me va ni me viene y, aunque parte del dinero invertido lo aporten las cofradías, me duele que en tiempos de crisis económica haya estos derroches. De igual manera que me duele en el alma esa prima de nada menos que 550.000€ que se pretende pagar ‘por cabeza’ a cada uno de los jugadores de la selección española de fútbol en caso de que ganen el mundial. En tiempos de crisis (y fuera de ellos), es inmoral y obsceno, independientemente de que el Estado «sólo» aporte con su subvención un 6% del total de presupuesto que maneja la Federación Española de Fútbol. Pero bueno, que me voy por las ramas, el patriotismo se me está escurriendo por la pata abajo y no hay que olvidar que esta noche hay partido: ¡Es-paaaaaaa-ña! ¡Cam-pe-oooooooooooooo-nes! ¡Cam-pe-ooooooooooo-nes! ¡Oe oe oeeeeeee! (Modo irónico off).

Tercera pregunta: A mí me parece muy bien que cada uno sea como quiera, ¿pero es necesario salir haciendo el ridículo con esos excesos y desfases? ¿Qué dirán sus pobres familias?

Respuesta: Querido/a lector/a, cuánta razón tienes… No, lo digo en serio, y me remito a lo que comentaba en la primera pregunta, es decir, que el orgullo gay es una reivindicación y eso no hay que perderlo de vista jamás. Pero claro, también es una fiesta… y siempre que hay una fiesta, ya se sabe que se da un cierto margen de maniobra para los desfases. Pero vamos, que tampoco sé hasta qué punto merece la pena generalizar. Lo digo por experiencia. No todos van en ese plan, doy fe: no porque yo haya ido personalmente a los Sanfermines, ojo, sino porque en los noticiarios se cuidan de sacar todo tipo de imágenes. Y aunque, por el contrario, cuando en los noticiarios hablan (por brevemente que SIEMPRE sea) del orgullo gay, sólo sacan pechos desnudos y taconazos, yo que estuve el año pasado personalmente, te puedo asegurar que hay mucho más que desfase y hedonismo… aunque nunca lo saquen en las noticias ni nada. Pero vamos, que sí, lamentablemente estoy de acuerdo en que el orgullo gay se ha ganado a pulso la triste imagen que tiene. Cosa que no pasa con otro tipo de celebraciones, así que por algo será. En resumidas cuentas, que te entiendo, querido/a lector/a: ¿qué dirán de tanto desfase las pobres familias de esos sarasas? Un bochorno, vaya. Y es que, desde que la celebración del orgullo gay se convirtió en algo multitudinario, aquí se están perdiendo todo orden y valores. Una pena, la verdad.

Cuarta pregunta: A mí me parece muy bien que se manifiesten, ¿pero es legal que lleven niños a la manifestación? Es que esto me parece ya el colmo… O sea, ¿qué opinión puede tener un niño sobre este tema? Vamos, no me jodas. ¿No puede hacer nada el Defensor del Menor para evitar que acudan a la manifestación?

Respuesta: Querido/a lector/a, cualquiera diría que me has leído el pensamiento. Y es que, sobre todo en una manifestación de este tipo, multitudinaria y tan larga, me parece como mínimo arriesgado llevar a niños encabezando la manifestación. Y esto lo afirmo independientemente de que en su día lo hiciera el Foro de la Familia para protestar contra la ley de matrimonios gays o lo hagan ahora los del orgullo gay ese. Además, ¿qué ‘puñetas’ de opinión bien formada y libre pueden tener los niños? Está claro, que, tanto en un caso como en el otro, ninguna. Una vez más, estamos de acuerdo.

2 thoughts on “Orgullosos de estar orgullosos”

  1. Sinceramente, felicidades por el contenido de su, más que artículo, reportaje pedagógico. Desde la heterosexualidad me hacia bastantes reflexiones críticas como las que usted plantea y explica tan acertada y mesuradamente sobre la manifestación referida. Le felicito porque me ha ayudado mucho a comprender el fenómeno social y a asumir más razonablemente este movimiento. Posiciones como la suya, a mi modesto entender, ayudan mucho a comprender estas realidades sociales. Y desafortunadamente para usted y para mí, los excesos de histrionismo y también el lema «Orgullo Guey», no beneficia. Como dice, sería más propio «Dignidad» que «Orgullo». Quien pueda, algo debería hacer en este sentido, creo que sería muy positivo. Repito: felicidades.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *