Ricardo Monzó no ha resistido la presión. El otrora Concejal de Fiestas de Novelda presentó su dimisión como Concejal del Ayuntamiento de Elda a primera hora de la tarde de ayer en el salón de plenos. Monzó, que llegó al consistorio eldense con un juicio pendiente por malversación de caudal público, estafa y falsedad documental, ha dimitido porque, según sus palabras “ninguna persona debe soportar un juicio paralelo”.
Monzó, concejal de Industria, Promoción Exterior, Turismo, Cementerio, Obras y Servicios en el ayuntamiento de Elda, ha sido uno de los concejales de mayor confianza de Adela Pedrosa. Suya fue la decisión de incluirlo en su lista y ahora parece que ha sido determinante en su salida. Aún asi, la desestimación en la Audiencia Provincial del recurso presentado por Monzó así como la cercanía del juicio oral han provocado una marcha repentina, que tanto el Ayuntamiento de Novelda como la oposición en Elda califican de “tardía”.
Caso «Cabalgata»
Antes de formar parte del equipo de gobierno eldense, Ricardo Monzó era concejal de fiestas de Novelda. El origen de todo está en una denuncia formulada por el PSOE de Novelda conjuntamente con unos proveedores que prestaron servicio en la cabalgata de reyes de 2007. El alcalde de Novelda, Mariano Beltrá y la concejal de Fiestas, Remedios Boyer, destaparon en enero de 2008 unas posibles irregularidades y denunciaron la existencia de facturas falsas y la reclamación por parte de los proveedores de 25.000 euros. Ricardo Monzó era, por aquel entonces, encargado de la organización de la cabalgata.
Monzó mantiene rotundamente su inocencia. “Como saben, estoy incurso en un procedimiento judicial en el cual unos proveedores del Ayuntamiento de Novelda afirman que han dejado de cobrar unos servicios prestados. Este hecho, convenientemente manipulado por el Partido Socialista de Novelda, se convirtió en una denuncia presentada por el propio Partido Socialista de Novelda y no por los proveedores. Y desde este momento, afirmo rotundamente la falsedad de las acusaciones” señala en un comunicado.
Lo cierto es que la Audiencia Provincial ha tumbado el recurso de Monzó por lo que el ex edil se tendrá que enfrentar a una vista oral. Monzó señala que renuncia al cargo «para afrontar como un ciudadano más un juicio, para evitar el uso político de mi persona y de mi familia, para deslindar lo público de lo privado». De este modo sella por fín dos años en los que la presión de sus acusaciónes por los presuntos delitos de malversación de fondos, estafa y falsedad documental ha podido con él.
¿Que cosas tan curiosas se dan esta política rastrera, que con empacho practican en el P.P Valenciano? ¿Es posible que un señor de Novelda, concejal, deja un pueblo para venirse a Elda, a ser super- concejal, por medio del modus operandis, de la confianza política? Pero resulta que el elegido por Adela Pedrosa es un presunto malversador fondos,y estafador. Aunque de que podemos extrañarnos ya, cuando la alcaldesa de Elda ya fue juzgada y condenada por ocupar un puesto a dedo, como pago de sus servicios políticos, saltándose los procedimientos legales para acceder al cargo de administrativa en Hospital de Elda. Ella tenía un enchufe y se conectó, pero la jugadita le salió mal, pues fue condenada. ¿Que esperamos entonces de personas tan poco honestas?
Lo más penoso es que quieren hacer creer que son un ejemplo de honestidad porque este tipo ha dimitido e instan a los demás partidos a que hagan lo mismo. Saben darle la vuelta a la tortilla y hay quien se deja engañar.