Es una de esas tradiciones de las que estar orgullos. En Petrer, el Día del Árbol, se viene celebrando desde hace aproximadamente 40 años, y regresa el domingo 14 de febrero. A partir de las 10 de la mañana, el rincón elegido este año para plantar árboles y arbustos será tras la casa del Dolç (entre el PNM Arenal del l’Almorxó y el campamento de Caprala). Para quien le apetezca llegar andando, se realizará una excursión guiada con salida desde el consistorio a las 9 de la mañana, con llegada prevista al lugar de plantación sobre las 10. Se recomienda llevar ropa cómoda y de abrigo y calzado adecuado para la montaña.
La elección de especies se ha realizado en función de la zona donde se va a realizar la plantación, siendo las más indicadas para adaptarse al entorno y así obtener los mejores resultados posibles. Este año se han solicitado a Consellería ejemplares de pino piñonero, pino carrasco, lentisco, almez y algarrobo. También se plantarán arbustos de esparto, espino negro, romero, aladiemo, efreda y aldaida.Posteriormente a la plantación se realizará una supervisión por si fuera necesario, llegados los meses de más calor, un riego de socorro.
Esta jornada internacional surgió con el fin de realizar una toma de conciencia en la importancia de los recursos forestales, el cuidado que se debe brindar a los árboles y la necesidad de introducir a los niños y niñas en el conocimiento y la práctica de una tarea a largo plazo. Con el paso del tiempo se ha ido consolidando en nuestra población como una de las actividades más importantes de la concejalía de Medio Ambiente.
Para complementar la actividad se está preparando un taller para los niños y niñas que se realizará simultaneamente con la plantación y que hará que disfruten y tomen conciencia de la importancia del cuidado de nuestro patrimonio natural. “Cada árbol que plantemos y conservemos marcará una gran diferencia para cada uno de nosotros”. Toda una declaración de principios la de la concejala de Medio Ambiente, Silvia Rodríguez, que, acompañada de la técnico del área, Maria José Gil, han animado a la población a sumarse a la iniciativa.
Ciertamente, no es poca la importancia de reforestar. Los árboles contribuyen a regular la temperatura y las lluvias, purificar el aire que respiramos y, entre otras cosas, proteger los suelos de la erosión, algo importantísimo en una zona como la nuestra, semidesértica, y en la que, si no hay vegetación se produce el arrastre del suelo y procesos erosivos. Los árboles además brindan alimento y refugio a multitud de animales, de tan notable variedad en nuestro entorno, el del Paisaje Protegido Sierra Maimgó-Cid. Por si fuera poco posibilitar esta vida, añadiremos su belleza y su inmensa inmensa contribución en la lucha contra el cambio climático, con su absorción de CO2.