Día tras días, inasequible al desaliento, José Amat «Guiña» ha estado recorriendo España con su ganado. Ha sido toda una vida que ahora, recién jubilado, estamos repasando en esta serie de vídeos a través de fotografías, y que no sólo nos hablan de su pasado, sino que dan fe y testimonio de una cosmovisión de la vida y la existencia y de un mundo rural vigente hasta hace bien poco.
En este capítulo, Guiña nos desvela cómo era manejar una honda o a qué jugaba en su niñez (¡adivinen: estaba destinado a ser pastor), pero también cómo era el transporte de ganado o qué sucedía cuándo dos hombres se chocaban las manos: «buf, eso ya estaba hecho, era un compromiso…»