El Circulo Feminismos y lgtbi PV de Podemos ha solicitado a la empresa Seat la retirada del último anuncio de la marca, un spot con el slogan «todo cambia para que nada cambie», en el que, según el partido, «se ensalza un modelo de masculinidad hegemónica patriarcal que pone en valor la figura del hombre «castigador» de mujeres y «coleccionista» de relaciones dolorosas para ellas, como un modelo ideal, natural e ineludible. Un anuncio publicitario, pues, que el círculo juzga «fuera de tiempo y absolutamente contrario a los valores de igualdad y equidad para los que tantos esfuerzos se están realizando desde hace años en nuestro país desde numerosos ámbitos».
«El anuncio muestra como referente la imagen de una lista de mujeres castigadas, víctimas de una relación dolorosa y, en la última mujer, la sexta, una mujer atractiva que se ofrece disponible a este mismo hombre, para ella un desconocido que acaba de llegar al bar de carretera en el que ella es camarera», explican. Y continúan: «Una fantasía estereotipada, que obedece a un modelo basado en la dominación de los hombres sobre las mujeres, siempre y cuando estas mujeres no sean ni sus madres ni sus hijas. El modelo de masculinidad de referencia que se ofrece es el típico patriarcal hegemónico en el que el hombre define su masculinidad por oposición a lo femenino, tradicionalmente asociado a la debilidad (la propia RAE así lo definía hasta 2014) y el sometimiento, entre otras etiquetas.
Este anuncio, como otros muchos, ofrece una escena en apariencia amable que podría protagonizar casi cualquier chico de nuestra cultura «sin recibir ni un reproche», reconocen desde Podemos, «pero esconde toda una cultura de la dominación, un modelo de masculinidad tradicional, patriarcal, discriminatorio, rechazable y con graves repercusiones también para los hombres».
El Circulo Feminismos y lgtbi PV anima, entonces, «a las firmas comerciales de este país a encargar sus campañas publicitarias a creativas y creativos más inteligentes, con conciencia acerca de la necesidad de empujar, también desde el ámbito publicitario, hacia una igualdad de género y una sociedad libre de discriminación y a asumir, como empresas, la parte de responsabilidad social que les corresponde en lo referente a la perspectiva de género, como sí han asumido y practican hacia otros aspectos de la realidad como el medio ambiente, la ecología o la cooperación al desarrollo».
Por otro lado, denuncian la «desaparición silenciosa» del observatorio de la publicidad sexista de la Generalitat Valenciana, «al que nos hemos dirigido sin éxito para denunciar este caso. No cuenta ya con dirección postal y nadie atiende las llamadas. Alentamos al nuevo gobierno valenciano a reactivar este servicio a la mayor brevedad dado que la publicidad es un poderoso agente de difusión de modelos que pueden perjudicar gravemente el trabajo en favor de la igualdad que se realiza con enormes esfuerzos desde innumerables ámbitos sociales y públicos».