El poeta petrerí Pablo Llorente (Pablowski) se proclamó campeón en la X Temporada del Poetry Slam Barcelona el pasado sábado y será el representante de la ciudad condal en el campeonato nacional, donde peleará por ser campeón de España en Zaragoza los días 22, 23, 24 y 25 de octubre.
Tras marchar de nuestra ciudad por esa pulsión poética que corre por sus venas buscando cotas más altas, Pablowski lleva cinco años participando en los diferentes poetry slams de Cataluña. Tras proclamarse tres veces subcampeón del Slam de L’Hospitalet y ganador y representante del Llobregat Slam Poetry la temporada 18-19, su gran oportunidad llegó este pasado sábado en el Centre de Cultura Contemporànea de Barcelona. Ante 400 personas, se enfrentaba a los ocho slammers (poetas) mejor clasificados de la temporada en el territorio, en lo que fue una final de infarto.
Pablo había completado una liga muy regular y partía con ventaja respecto sus más inmediatos perseguidores, los ya referentes nacionales Isa García (tres puntos por encima) y Salva Soler (cinco puntos). Matemáticamente, nuestro poeta sólo debía clasificarse para la siguiente ronda para ser el campeón, pero sus nervios amenazaban con jugarle una mala pasada. De hecho, se había pasado de tiempo en sus dos últimas participaciones y había sido penalizado.
«Por ese miedo contra el crono», confiesa, «no tuve claro hasta la noche del viernes qué poema recitaría». La elegida fue una obra en la que jamás había sobrepasado el tiempo en los entrenamientos, a los que rigurosamente somete a todos sus poemas, trabajando en la dicción y la ejecución óptima de sus versos. «Decidí sacar “Canto de amonal”, una pieza sobre la Guerra Civil para la que estuve trabajando casi tres meses, inspirado en la obra de uno de mis referentes, Enrique Falcón y su obra «La marcha de 150.000.00» (con un fragmento en «petrerí»).
La posición de salida siempre es clave, y esa noche más ya que el jurado suele puntuar a la baja para calibrar pizarras a lo largo de la competición. El sorteo al azar quiso que Pablowski saliese a recitar en tercera posición y tuviera que aguantar la presión de los cinco competidores que venían detrás (entre ellos los dos rivales más directos) para saber si pasaba a la siguiente ronda. Cuando llegó el turno del séptimo slammer, este sacó una décima menos que Pablo y en ese momento explotó de emoción a falta del poema del último poeta.
Sólo los participantes y unos pocos amigos y familiares sabían que el campeonato era del petrerí. Así que, tras el descanso que caracteriza la competición, los cuatro finalistas salieron por orden inverso a la puntuación. Nuestro poeta salió segundo, ya sin presión, y terminó la velada con un poema social titulado “Sombra y metralla”. El slam de febrero lo ganó Isa García, la andaluza, presidenta de Slam España y organizadora junto a Pablowski del Slam Santako. «Fue una noche redonda», rememora Llorente.
El presentador pidió a los participantes que subiesen todos a escena, anunció la victoria de Isa y después llegó el gran momento: “Hoy había una persona que si conseguía pasar de ronda ya era campeón de la temporada 19-20, y él es el Gran Pablowski”. Payaso Manchego, el speaker, reconoció así el gran trabajo de nuestro poeta y recalcó el contenido poético de Pablowski. El público se puso en pie para celebrar y dar ánimos al que sería ya su representante en el campeonato nacional. Pablowski agradeció al público presente, paró los aplausos y las puestas en pie, «porque me avergüenzan esos momentos», y se acordó de todos los compañeros y compañeras del slam que le habían animado en sus momentos más duros y pesimistas.
Petrer no podía faltar, claro, en esa noche mágica. Apareció en ambas poesías el guiño a nuestro pueblo y su historia, con versos como: “Mirad la cosecha de pasado y esquelo: Gernika, batalla, ebro, milicia, bomba, 36. Barricadas, columnas, brigadas, ¡Petrer!”
Henchido de agradecimiento por la conexión que conseguido establecer con el público, y casi como una profecía de su ya lejano «Versos escritos en un colchón bomba», la onda expansiva de su victoria lo llevarán de gira poética antes de la gran final nacional, que Zaragoza acoge en octubre. Las llamadas de otras sedes oficiales no se han hecho esperar y Pablowski nos confirma varios destinos: viajará a Valencia, Menorca, Granada…¡y Petrer! «Me siento realizado porque por fin voy a poder recitar en Petrer y a presentar mi libro, «La hegemonía de las golondrinas». Será este 14 de marzo, dentro de las jornadas literarias, y cumpliré mi promesa de volver con un trabajo nuevo de casi tres años, y enseñar mi oficio».
Enhorabuena Pablo, un nuevo e importante hito en tu carrera. ¿Cómo te sientes? ¿Sigues con la sonrisa en el rostro?
Me siento muy satisfecho con esta victoria, no ya por el reconocimiento o el título, sino porque he conseguido vencer al miedo y al autosabotaje. Tengo el gran defecto (porque me lo han hecho ver las personas más cercanas y que más me conocen) de ser mi peor crítico y enemigo, y pocas veces en la vida me he atrevido a decir en voz alta, como lo dije el sábado delante de 400 personas, que me siento feliz.
También estoy satisfecho porque jamás pensé que tanta gente pudiese empatizar con mi poesía, o que llegar a ser valorada en este formato, porque la gran mayoría de mis textos son de corte o tinte dramático y pesimista. Son muy encriptados y metafóricos, donde la pintura juega un papel muy importante, y temía que quizá no se “entendiesen” en un solo recitado de 3 minutos.
La final nacional. Tú mejor que nadie sabe lo que cuesta llegar ahí. ¿Tienes más presión ahora?
¡No, por Dios…,ya se acabó! Venía de unas cuantas decepciones enormes conmigo mismo, después de pasarme de tiempo en la última jornada de la liga anterior de Hospitalet, donde me pasé 14 segundos y perdí el título. Conseguí ser representante esa misma temporada de la sede de Llobregat y cuando llegó el nacional me quedé en blanco y tuve que improvisar para que no se notase durante casi 40 segundos, hasta conseguir retomar el texto,y finalmente me quedé a un segundo de ser descalificado de la competición. Además en las últimas dos jornadas de la liga de Barcelona me había pasado lo mismo…¡La lucha contra el crono ha sido muy difícil! Así que la presión que me había cargado durante casi un año no la conseguí deshacer hasta que terminé el primer poema en la final del sábado y la pieza no fue penalizada.
¿Te lo esperabas? Partías en primera posición.
No, para nada. Mucha gente no me creía y piensa que es falsa humildad. Pero 3 puntos de ventaja en un slam no es nada. Ten en cuenta que el ganador suma 5, el segundo clasificado 4, y el tercer y cuarto puesto suman 3. Además Isa García es de las mejores slammers de España y las últimas jornadas estaba imparable. Sus textos son magníficas obras de arte. Trabaja duro y tiene una puesta en escena que te revienta por dentro y por fuera. Estar sólo tres puntos por delante de ella no me daba seguridad y más sabiendo que el azar decide las posiciones de salida e influye mucho este factor.
Sin presiones, satisfecho, realizado. Realmente te has quitado un peso de encima, ¿verdad?
Me siento muy realizado sobre todo por haberme quitado la espina ( ¡ya empezaba a ser corona de espinas!) del tiempo. Cada Slam y cada sede tienen su idiosincrasia, su público, sus gustos. Los escenarios varían (tamaño, luces, sonido, público) y nunca se sabe qué puede pasar, a quiénes les “caen” las pizarras, los gustos del jurado de esa noche, etc. Es la gracia de este “juego”.