Es común hablar del Patrimonio Cultural existente en Petrer, del castillo medieval, el Pantanet, el Pou de Neu y la ermita de Catí, los hornos harineros de pólvora, etc… Sin embargo, apenas se habla de su Patrimonio Natural y menos si cabe de su magnífico Patrimonio Arbóreo.
En el Catálogo del Patrimonio Cultural de Petrer abundan las construcciones históricas, como acueductos, ermitas, masías, hornos, etc. pero la diferencia de estos elementos respecto del Patrimonio Arbóreo es básicamente que en este caso hablamos de «seres vivos», en constante transformación, que han perdurado a lo largo de décadas e incluso siglos, siendo testigos silenciosos de los acontecimientos históricos que se han ido sucediendo a lo largo del tiempo, que han resistido de manera sorprendente a heladas, sequías, vendavales, incendios forestales, plagas y enfermedades, talas, transformaciones del uso del suelo, vandalismo… pero que también se han beneficiado del cariño y cuidado que les han ofrecido los habitantes de esta región.
En el municipio de Petrer y en especial en el área que abarca el Paisaje Protegido Serra del Maigmó y Serra del Sit existe una magnífica representación de ejemplares botánicos que por sus características excepcionales, ya sea por sus dimensiones destacables o por tratarse de especies leñosas raras, tienen un altísimo valor histórico, sociocultural, científico y de recreo tanto para los habitantes de este municipio como para el público en general. Estos árboles y arbustos representan una parte singular del patrimonio medioambiental de Petrer y han dejado de ser meramente árboles forestales, agrícolas uornamentales para convertirse en piezas únicas de un patrimonio natural y cultural formado por árboles monumentales vivos, en auténticas obras de arte producto de la naturaleza.
Estos árboles, generalmente están ligados al paisaje humano, a excepción de algunos ejemplares que vegetan en recónditos barrancos o zonas alejadas de la civilización, ocupando lugares destacados, como entradas de masías, junto a fuentes y nacimientos, en eras… cumpliendo funciones tradicionales y sociales muy importantes, ya sea como lugar de cobijo o refugio, como fuente de recursos naturales (frutos, leña, setas…) o como elemento paisajístico de vital importancia en la vida rural.
Además, son especies que cumplen funciones básicas dentro de la cadena trófica, permitiendo el desarrollo de otros seres vivos, como pueden ser invertebrados y vertebrados, musgos, líquenes o setas, y ofrecen otras aportaciones tan importantes como la protección del suelo frente a la erosión y la recarga de acuíferos.
Por casi todos son conocidos algunas de estas obras maestras de la naturaleza como el Castaño de Indias de la Finca de la Administración, en el Valle de Catí, el pino monumental del Área Recreativa de Ferrusa o el pino de l?Avaiol. Sin embargo, éstos apenas representan tres ejemplos del gran catálogo de árboles singulares existentes a lo largo de nuestro municipio.
