Bien conocido es el amor e interés que el entorno rural de la localidad despierta entre los petrerenses, siempre vigilantes ante posibles agresiones ecológicas. Así, un vecino, al que agradecemos su confianza, nos informó en las redes sociales de lo que parecía ser «una poda criminal». Afectaba a un seto de unos cien metros de tuya (variedad de ciprés) en las últimas postrimerías de la rambla de Puça, ya en zona urbana, contigua a la avenida de Alfonso X el Sabio. Desde la publicación nos desplazamos a la zona para confirmar o desmentir este extremo con el ecologista, jardinero y experto arboricultor Javier Martínez Orgilés, principal responsable de la iniciativa de Encuentros del Vinalopó y presente en consejos de medio ambiente de poblaciones de toda la comarca.
Martínez confirma lo que a simple vista se aprecia como una ‘masacre’: «Para ahorrar costes, le han metido a este seto, de gran valor ornamental, la desbrozadora de brazo, produciéndoles unos cortes de 30 centímetros, con lo que se despelleja el ejemplar, especialmente en su zona central, creándoles entradas de podredumbres y enfermedades. No se han realizado cortes limpios ni se han usado las herramientas adecuada, tampoco se ha saneado; como consecuencia la planta seguirá un crecimiento irregular y descompensado, necesitará un aporte mayor de agua y en lo que es el centro tardará años en recuperarse. También puede enfermar y morir, así que no es un trabajo profesional ni mucho menos».
El trabajo de poda y desbroce fue realizado en una mañana por una empresa privada contratada desde la concejalía de Servicios, según han confirmado fuentes del ayuntamiento. Es más, la concejala de Medio Ambiente, Conchi Navarro, ha explicado a este diario que conocen la actuación y «no les ha gustado», por lo que han pedido «explicaciones» a la empresa encargada del mantenimiento: «saben que se actuó mal, así se lo hemos hecho saber, y supongo que internamente el contratista tomará medidas. Ahora, por nuestra parte, no se puede hacer nada, simplemente esperar a que crezcan».
«La zona es un enorme pipicán»
«El problema es que no es algo puntual», explica Javier Martínez, «por ejemplo, hemos podido contemplar recientemente otra poda criminal en el monumental lentisco de los Cotxinets. Y son hechos que se han denunciado en anteriores ocasiones en el Consejo Local de Medio Ambiente, donde siempre se le ha pedido al ayuntamiento que, al menos, se ocupe de dar un mantenimiento profesional a las zonas preurbanas de la población. Si no se desbroza en condiciones, incluso en invierno se están generando posibilidades de incendio». En este sentido, hoy mismo ha habido un conato en Salinetas: «y puede ser que veamos otro en poco tiempo en el solar encima de la Bassa Perico, que no se ha desbrozado», denuncia.
«Lo reseñado es lo mínimo exigible», prosigue Martíenz, «porque se podrían hacer muchas cosas: en la zona del seto lastimado, sin ir más lejos, se podría realizar un paseo didáctico para los colegios, se pueden introducir charcas con sus anfibios, se pueden reintroducir especies arbóreas… Lo más interesante es que, con un buen plan de actuación, la rambla de Puça podría mantenerse sola, con un coste municipal mínimo. Estas ideas se han propuesto en su respectivo foro, como el Consejo Local de Medio Ambiente, pero siempre hemos recibido por respuesta que no es una zona de actuación de la concejalía, que depende de urbanismo, obras y servicios y, en según qué casos, de la Confederación Hidrográfica. Yo no me voy a meter de quién es o no competencia, pero está claro que lo que podría ser una zona de gran valor ambiental ha acabado siendo una enorme pipicán y zona de botellón. En este sentido, sí me gustaría decir, pues lo sé de primera mano, que en otras poblaciones iniciativas como las propuestas se realizan con gran éxito. Aquí en Petrer, sinceramente, he perdido un poco la fe».
Ahora, por nuestra parte, no se puede hacer nada, simplemente esperar a que crezcan”…. parece mentira que la gestora medioambiental no sepa que si se puede hacer algo, bastaria con arreglarles los cortes con unas simples tijeras. Deberia de apuntarse a alguna escuela taller o taller de empleo a ver si aprende algo sobre lo que dirige.
Reclamar a la empresa concesionaria la restitución del daño ocasionado sería lo más elemental. Se hace con los ciudadanos; ¿porqué no con las empresas?