Esta mañana, la alcaldesa de Petrer, Irene Navarro, y el concejal de Urbanismo y Patrimonio, Fernando Portillo, acompañados por los técnicos de ambas concejalías, han presentado el proyecto de remodelación integral de la plaça de Baix, proyecto que cuenta con un presupuesto aproximado de 1,5 millones de euros y cuyas obras se prevé que comiencen después de las Fiestas de Moros y Cristianos de 2022.
La alcaldesa de Petrer ha calificado este proyecto como “la guinda del pastel del proyecto de reforma, revitalización y modernización del casco histórico de Petrer”, destacando que “en estos tiempos en los que todas y todos escuchamos que el centro histórico reclama medidas, hay que ser valientes con acciones como esta, apostando por el futuro y poniendo en valor unos de los principales potenciales que tiene Petrer como es el centro histórico, considerada históricamente centro neurálgico de nuestra ciudad”.
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Navarro también ha precisado que “una obra siempre genera problemas y molestias, por eso pedimos disculpas por adelantado, pero con el convencimiento firme que es lo correcto para Petrer, para la zona y, sobre todo, para la calidad de vida de las vecinas y vecinos”.
Fernando Portillo ha explicado que se trata de un proyecto en el que, desde la concejalía de Urbanismo, se está trabajando desde hace meses y que solo “está pendiente de dos detalles, la incorporación de la solución que demos para la integración de los restos de la escalera del refugio antiaéreo y, si surgiese alguna cuestión durante estas excavaciones de sondeo, también tenerlo en cuenta”.
Portillo ha precisado que “con las intervenciones la plaza va quedando un poco más deteriorada de lo que ya estaba, pero queríamos presentar hacia donde vamos, para tenerlo todo preparado con idea de que, después de moros del año que viene, habrá terminado la actuación en Gabriel Payá y Derrocat, y se pueda comenzar la actuación aquí”.
El proyecto
Fernando Cerdá, arquitecto municipal del Ayuntamiento de Petrer, ha indicado que este proyecto de remodelación de la plaça de Baix forma parte del «Plan de acción para la revitalización del centro urbano», cuyas obras se inician el próximo martes 2 de noviembre en la calle Gabriel Payá.
El proyecto contempla un diseño de arquitectura moderna, sin perder de vista la iglesia y el entorno en el que se ubica, mediante una plaza dura en la que prácticamente se va a duplicar la superficie de la plaza con la eliminación de los carriles laterales, pudiéndose solo circular por delante del Ayuntamiento y,ocasionalmente, por delante de de la iglesia.
Cerdá también ha detallado otros aspectos importantes de la nueva plaza como la posibilidad de que tenga un ambiente en invierno y un ambiente en verano, mediante la incorporación de unos pilares que en época estival servirán para colocar unas lonas tensadas a modo de toldos; la disposición de mobiliario y elementos verdes móviles que puedan ser retirados para la celebración de eventos; la instalación de una fuente escamoteable con chorros pisables cuando dejan de funcionar; o un pavimento en el que se van a reproducir los colores básicos del mosaico romano conversado en el Museo Dámaso Navarro.
Trabajo de catas arqueológicas
Fernando Tendero, director del Museo Dámaso Navarro, ha explicado que, antes de comenzar las obras en sí, en las próximas tres semanas se ha previsto la realización de 4 catas arqueológicas de unos 8 metros cuadrados, distribuidos por la plaza para conocer la estratigrafía del subsuelo.
Estos sondeos arqueológicos permitirán comprobar cómo se encuentran los restos de las culturas pasadas, si han sido afectados por las raíces, la secuencia histórica de los mismos (romano, medieval, moderno y contemporáneo), hasta qué profundidad se encuentran, etc.
Todo ello con el propósito de incluir estos aspectos en el proyecto de reurbanización por parte del área de Urbanismo, medidas y precauciones patrimoniales que aminoren la afección a los posibles restos arqueológicos existentes en el subsuelo.