Petrer ha cerrado el fin de semana de sus XXIV Jornadas de Puertas Abiertas del Patrimonio con un balance de más de 700 personas que han visitado los monumentos más emblemáticos del municipio. Se han superado los visitantes que se registró en 2019 (600), antes de la pandemia, por lo que desde el consistorio lo consideran un éxito.
De manera detallada, el Castillo-fortaleza registró un total de 647 visitas, las casas-cueva, 522, el Museo Dámaso Navarro 274 visitas, el puesto antiaéreo de El Altico, 197 y las ermitas 106. En cuanto al campanario de la Iglesia de San Bartolomé, espacio que solo se abre durante estas jornadas de Patrimonio, recibió la visita de 30 personas debido a que eran grupos muy reducidos y realizados en tres pases entre el sábado y el domingo para no interrumpir los servicios religiosos.
En relación con el año anterior, cuando las restricciones por la pandemia eran más severas, todavía había reparos a participar en actos públicos y las visitas a los monumentos se hacían cada media hora, la cifra ha aumentado considerablemente, ya que en 2021 se contabilizaron 219 visitantes.
Los visitantes, como en los años anteriores, fueron mayoritariamente de Petrer y Elda, aunque también pasaron por el centro histórico personas que vinieron de pueblos de alrededor y de lugares más lejanos como Murcia, Madrid, Salamanca, Cataluña u Holanda.
Ezposición temporal carpintería tradicional
Coincidiendo con las Jornadas de Puertas Abiertas del Patrimonio, el Museo Dámaso Navarro inauguró su nueva exposición temporal, la segunda desde la apertura de la sala de exposiciones temporales.
Se trata de una exposición etnográfica titulada “Trabajando la madera: la carpintería tradicional en Petrer”, que se podrá visitar hasta principios de diciembre y que supone un reconocimiento a todos los carpinteros tradicionales que han trabajado en Petrer.
La exposición está dividida en tres espacios o ámbitos. Un primer espacio que muestra el medio de donde se obtiene la madera, la materia prima para poder trabajarla; un segundo espacio que recoge las herramientas que utilizaba el carpintero tradicional; y, finalmente, un tercer espacio con el resultado, los productos de ese trabajo, tanto de carpintería como de ebanistería, donde se muestran objeto útiles para trabajar, pero también la parte artística, como son la selección de esculturas de madera de la colección de obras de arte del Ayuntamiento creadas por el escultor alemán Adolf Pfrommer, y las maquetas de moldes de hormas de calzado femenino que donó Antonio Vieco.
La exposición también cuenta con la proyección de un breve reportaje-documental que tiene como protagonista a a uno de los carpinterosuno de los carpinteros
tradicionales de Petrer, José Ángel, de la carpintería La Foia.