La “regularizacion catastral 2013-2017” es un nuevo procedimiento de incorporación de los bienes inmuebles al catastro, es decir, a la tributación por el IBI. El próximo BOE del 25 de junio publicará la inclusión del municipio de Petrer en este procedimiento de regularización catastral.

Se crea por ley  en el año 2012, y con una vigencia predeterminada de antemano para los años 2013-2017. Nace con dos finalidades: la primera es luchar contra el fraude fiscal (el que supone no tributar por los inmuebles, o por sus ampliaciones, etc.) y la segunda  como medio de sostenimiento de los ingresos municipales, muy alicaídos en esta época de crisis; y por supuesto con la premisa constitucional de la justicia tributaria y de la generalidad.  «La regularización no supondrá cambios a los ciudadanos ni en el valor catastral de sus inmuebles, ni el recibo del IBI, sino que afecta sólo a aquellos inmuebles cuya información no se encontrara actualizada en el catastro hasta la fecha por diferentes motivos», explica el edil de Urbanismo, Fernando Portillo.

El tiempo medio de duración de los trabajos en cada municipio en principio es de seis meses. A través de la empresa Geonet de la Diputación de Alicante, los trabajos comenzarán la semana que viene para la puesta en marcha del proceso de regularización catastral 2013-2016. Por este motivo, técnicos de dicha empresa durante las próximas semanas visitarán la localidad para la toma de fotografías y mediciones. En este sentido, desde el ayuntamiento, los vecinos tienen a su disposición, en la Oficina Municipal de Catastro (con sede en la Concejalía de Urbanismo), asesoramiento técnico para explicar o comprobar si es correcta la documentación recibida por los vecinos.

Una regularización masiva en casi 8.000 municipios

La Dirección General del Catastro tenía  en el año 2012 la  constancia, debido a los estudios realizados, de la existencia en España de un parque de viviendas (y ampliaciones de las mismas, con piscinas,  trasteros,  barbacoas; cambios de uso, etc.)  que por diversas causas se encontraban omitidas en el Catastro, es decir, que no tributaban.

Con esta regularización, pues, la Dirección General del Catastro persigue esencialmente la actualización de los datos constructivos de los inmuebles, siendo por lo tanto su objeto aquellos bienes inmuebles que hayan sido objeto de construcción, ampliación, reforma, rehabilitación o cambio de uso y dichas características no figuren en la base de datos catastral.

La detección de dichas discrepancias -que ya hemos dicho en Petrer realizará Geonet- se realiza utilizando todos los medios existentes en la actualidad: ortofotografias recientes, recorridos de contraste, cruces  alfa-numéricos de las bases catastrales ,  informaciones registrales, archivos etc. Es un proceso masivo, la Dirección General del Catastro debe contrastar con la realidad la descripción catastral de más de 37 millones de inmuebles urbanos y casi 40 millones de parcelas rústicas en 7.595 municipios. Y tiene una tasa de 60 euros por inmueble regularizado, que paga su titular; con dicho importe, el procedimiento se autofinancia, siendo el coste para el ayuntamiento nulo.

Hasta la fecha ya van casi tres mil municipios en regularización. Los resultados obtenidos en el año 2013 y en el 2014 han puesto de manifiesto un nivel de omisión media de entre un 3% y un 10%  en cada municipio regularizado. En este sentido, el Subdirector del Catastro, Fernando de Aragón, señala que  es importante tener en cuenta que, una vez transcurra el procedimiento de regularización en un municipio, el objetivo es dejar el Catastro lo más actualizado posible. «Para ello hay que hacer un esfuerzo para lograr el máximo nivel de colaboración para que no volvamos a tener omisiones. Ahora la actividad inmobiliaria es menor, pero debemos estar atentos para diagnosticar por qué hemos llegado a esta situación, y poner las medidas que acaben con la situación de no declaración, y así lograr que la información llegue al Catastro».