Petrerense 1 –  1 La Coca deAspe

La temporada comenzó para el Petrerense el pasado sábado, con un equipo con muchas caras nuevas, desde los jugadores al entrenador. Incluso vivimos cambios en las gradas, con muchísima más gente en el Barxell de la que ha sido habitual en los últimos tiempos.  ¿Y cómo salió la cosa? Excepto por el jarro de agua fría en el minuto final, parece que esta temporada promete buenas nuevas.

Así, prácticamente desde el primer minuto, el Petrerense se hizo con el control del partido, jugando bien al toque y con bastante movilidad, recordándonos al equipo del primer semestre del año, que cuajó la mejor segunda vuelta de la división la temporada pasada. La Coca, por su parte, se limitó a plantar el autobús y buscar la portería contraria en algún contraataque o jugada a balón parado.

Las mejores ocasiones de la primera parte las tuvo el equipo local: Miguelico, muy activo, erró dos oportunidades claras ante el portero, Pedro remató fuera un balón franco tras saque de córner y a Coti le hicieron una buena parada en un disparo desde la frontal. El Petrerense llegaba bien y parecía que el gol era cuestión de tiempo; aunque quizá, así es el fútbol, la ocasión más clara de la primera parte la tuvo La Coca, con un disparo al travesaño.

En la segunda parte se repitió el guión de la primera: el Petrerense, que anda bastante bien físicamente a estas alturas de la temporada, siguió intentándolo, y el equipo aspense redobló fuerzas en defensa. Tanto que, a los quince minutos, se quedaba justamente con diez hombres por doble amarilla.  A partir de este momento, la superioridad era clarísima, pero no acababa de entrar el gol. Finalmente llegó a un cuarto de hora del final, en una bonita jugada por la banda de Gustavo, que centra al corazón del área donde un gran testarazo de Miguel Ángel deshacía la igualada.

El equipo había hecho lo más difícil, pero se quedó con cara de tonto cuando La Coca materializó el gol en su único lanzamiento a puerta en la segunda parte. Para más inri, fue en el último minuto, aunque eso sí, el gol fue inapelable: una falta perfectamente ejecutada desde la frontal ante la que nada pudo hacer el guardameta.

“Nos vamos con un sabor agridulce”, nos contaba el entrenador Baldo Garrido, que se ha estrenado con este partido en el banquillo, “pero lo cierto es que el partido nos ha gustado, hemos hecho muchas cosas bien y todavía tenemos mucho margen de mejora”. Sorprendido por el “buen tono físico” del equipo, Baldo insistió en que todavía hay que trabajar “cuestiones tácticas”, pero que ha sido un comienzo esperanzador “al que tenemos que darle continuidad”.

El Petrerense se mide este domingo al Algorfa en la segunda jornada de liga.