¡El galápago leproso vive!

Ejemplares de galápago leproso, que se creía extinta en el territorio, han sido hallados en el río Vinalopó. El reptil acuático y autóctono (es una especie exclusiva de la Península Ibérica y el norte de África) ha aparecido en un tramo del río muy contaminado, entre desperdicios, fango y vegetación. A pesar de ello, y tal como informan sus descubridores, el equipo de trabajo que está tras la iniciativa Encuentros del Vinalopó, la especie se reproduce y forma una colonia estable, «sin que ningún técnico ni organismo oficial se haya constatado de ello».

El apareamiento es de marzo a julio. La hembra, que pone de 2 a 20 huevos, puede tener varias puestas en este período. Fotografía de Thomas Real.

El gálapago leproso es de gran interés faunístico y su descubrimiento una gran noticia, pues su población está en fuerte regresión y aparece como «vulnerable» en el Catálogo Valenciano de Especies Amenazadas de Fauna (Decreto 265/1994). La especie tiene el caparazón aplanado, con una forma más o menos redondeada, y mide en los adultos, por término medio, 15 centímetros de longitud. Hiberna en los meses más fríos (han sido hallado ejemplares enterrados en el barro) y es una especie fundamentalmente acuática, aunque a veces también salen al sol a la orilla del agua. Su media de vida es de 20 años y las amenazas al reptil son de tipo directo: su captura directa, generalmente para la tenencia doméstica; la contaminación y destrucción del hábitat y la introducción de especies invasoras, en especial  la tortuga de orejas rojas.

El caparazón es más largo que ancho y se presenta ligeramente aquillado en los individuos más jóvenes. De él sobresale la cabeza, con un largo cuello que en los más jóvenes presenta franjas amarillentas. Fotografía: Thomas Real.
La vida se ha abierto paso incluso en aguas contaminadas. Fotografía: Thomas Real.

Hitos de  Encuentros del Vinalopó

Este descubrimiento se suma a otros hitos importantes en los últimos tiempos: hace sólo unos días, en Novelda se descubrieron las dos últimas colonia de peces Fartet -una especie en peligro de extinción- cercanas al Vinalopó, y a principios de año, el colectivo Salvatierra de Villena halló la que podría ser la mayor población de gallipatos -una especie de tritón- de toda la provincia de Alicante.  Todos estos logros están unidos de una u otra forma al trabajo que está realizando el colectivo-paraguas de Encuentros del Vinalopó, que agrupa a expertos sobre naturaleza y patrimonio y que lleva varios años luchando «para que todas las personas que habitan en el río conozcan la situación en la que se encuentra». En este sentido, destacan que «las labores de investigación, limpieza y ponencias que estamos realizando facilitan el descubrimiento de nuevas especies que ya se creían extintas en la cuenca del río Vinalopó».

«Esperamos que estos hallazgos sirvan para una mayor protección y conservación del río Vinalopó», añaden desde el colectivo. «La meta final, en la que deben implicarse los ayuntamientos ribereños y los colectivos es conseguir una figura de conservación para el río de las instancias gestoras superiores, pero también, y sobre todo, crear una conciencia de conservación de nuestro río, posiblemente el mayor legado histórico, cultural y ecológico que tenemos los habitantes de las comarcas del Vinalopó». Las V Jornadas de Encuentros del Vinalopó y su exposición itinerante aún se pueden disfrutar en la casa de cultura de Novelda.

 

 

6 thoughts on “¡El galápago leproso vive!”

  1. Enhorabuena al colectivo «Encuentros del Vinalopó» pues están realizando una gran labor!
    Confíemos en que ahora esta especie pueda seguir viviendo en paz.

    Gracias!!

  2. ! Desde luego vaya labor que estáis realizando ¡
    Nos estáis dejando con la boca abierta con vuestros descubrimientos.
    Resulta apasionante seguir vuestras rutas y aventuras por el rio Vinalopó en la radio, estais, ciertamente redescubriéndonos nuestro olvidadísimo rio .
    Un saludo a todos y !Endavant¡

  3. Al leer esta noticia, vuelven a mi memoria los recuerdos de aquellos primeros días de vacaciones de verano, esas que nos daban en la «escuela»(todavía no teníamos costumbre de decir «colegio»),allá por los años 60 del pasado siglo, y entre otras correrías que de niños hacíamos, una de las más frecuentes y divertidas era bañarnos en el rio, donde era frecuente ver otros grupos de chavales de diferentes barrios de ELDA Y PETRER…
    Nuestro lugar preferido era el tramo de cauce que comprendía desde la curva de la Horteta, por donde entonces estaba la fabrica de cartón de MAESTRE, hasta la de Hormas AGUADO, cerca ya del puente de la Estación junto al Castillo.
    Sus aguas en este recorrido de casi un kilometro, transcurrían primorosas y limpias, creandose pozas en algunos tramos donde,
    por el efecto de la erosión del agua, se llegaban a los dos
    metros de profundidad, siendo para nosotros motivo de verdadero frenesí el lanzarnos al agua desde los monticulos cercanos, que a modo de trampolín, servían para competir entre nosotros…
    Incluso recuerdo que en la ribera del rio que queda por debajo del Barrio de la Huerta Nueva, habían cientos de arboles que bordeaban sus orillas, muchos de ellos frutales, pertenecientes a pequeñas fincas de labor que existían por la zona.
    Y recuerdo esas tortuguitas, y culebrillas de agua, y sapos, ranas, cucharatones, peces….

    Agradezco lo que haceis por nuestro RIO VINALOPÓ..

  4. De verdad que vuestras palabras me provocan un nudo en la garganta y me empañan los ojos, sin duda son las que nos hacen andar, tener claro que nuestro objetivo es común a todos los habitantes ribereños y no vamos a parar, gracias a todos por vuestros ánimos, aprovecho también para daros una buenísima noticia; por fin tenemos fecha para las jornadas en Petrer, del 1 al 24 de Marzo en el Horno Cultural, y necesitamos fotos antiguas del río, conferenciantes, expertos….y personas dispuestas a colaborar, así es que ya sabéis a correr que ya falta poco!!!

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