Unas filtraciones detectadas en un tramo de alcantarillado en la céntrica calle Gabriel Payá han obligado al Ayuntamiento a activar la maquinaria administrativa con carácter de emergencia para resolver un “grave problema”, según indican los técnicos municipales. Un problema originado por el deterioro de la red que, de persistir, podría poner en riesgo el firme de la calzada.
Los trabajos se han adjudicado con carácter extraordinario mediante un decreto de Alcaldía, por un importe que ronda los 20.000 €, y consistirán en la reparación del pozo de alcantarillado que hay a la altura del número 5 de la calle Gabriel Payá, a la altura de la confluencia con la calle Luis Chorro, y la sustitución del tramo de conducción que conecta este pozo con otro que hay calle arriba, en la zona donde se bifurca la vía.
Además de los problemas de filtraciones que está afectando a la estabilidad del terreno, existe también una cuestión de salubridad al tratarse de aguas residuales, que el Ayuntamiento quiere atajar de manera inmediata. “Los problemas se han detectado mediante la revisión del alcantarillado con una cámara subterránea y los técnicos nos aconsejan actuar con celeridad y es lo que vamos a hacer”, ha explicado el concejal de Servicios Generales, Fernando Díaz.
Hoy se ha firmado el decreto de Alcaldía, aunque previamente han sido informados todos los grupos municipales debido al carácter de emergencia de la medida, y la semana que viene se convalidará en el pleno ordinario correspondiente al mes de julio.
Estas obras afectan también al tráfico rodado en uno de los puntos más transitados, ya que es la vía principal para llegar al Ayuntamiento y a otros servicios administrativos y financieros que tienen su oficina en la zona. De hecho, se va a suprimir el aparcamiento de vehículos en el tramo afectado por las mismas mientras duran las obras, y “se va a poner en marcha un dispositivo especial de reordenación de tráfico para tratar de afectar lo menos posible y establecer itinerarios alternativos en caso de que fuese necesario”, ha indicado el concejal de Seguridad Ciudadana, Pablo Lizán.
El enlace de la calle Gabriel Payá con José Perseguer, que da acceso a La Explanada, quedará cortado cuando las obras lleguen a ese punto, estableciéndose un itinerario alternativo a través de la calle País Valenciá que estará debidamente señalizado.
En principio, tal y como ha explicado el concejal, quedará abierta la vía pero con los vehículos tendrán que circular con precaución. Se tiene previsto que durante el desarrollo de las mismas, a no ser que ocurra algún imprevisto, la conexión de Gabriel Payá con el “Derrocat” quedará en todo momento abierta al tráfico por lo que no habrá problemas para llegar al Ayuntamiento y al resto de servicios que se ubican en la zona. En cualquier caso y ante la evolución de las obras, Lizán ha indicado que “las posibles incidencias que puedan afectar al tráfico rodado se irán analizando y tomando decisiones conforme se vayan produciendo”.
Las obras tienen una duración aproximada de mes y medio aunque se realizarán en dos fases. La primera en la que se abrirá la calle y se subsanará la red, y una segunda en la que se hará el reasfaltado una vez que la empresa a la que se ha adjudicado la obra pueda disponer del material necesario al estar de por medio las vacaciones de verano.