Como si de un milagro se tratase, el agua vuelve a fluir por la canaleta al aire libre situada en El Parat del Catxuli, un ribazo petrerí cercano a Rabosa y Catí. Un descubrimiento sin duda sorprendente teniendo en cuenta que vivimos uno de los veranos más secos de la historia y que hacía treinta años que el agua no campaba a sus anchas por este canal de unos 60 metros de longitud que años atrás sirvió de balsa de riego. Sin embargo, el deterioro que sufre la canaleta, con múltiples roturas, y la maleza que crece en su interior provoca que, a día de hoy, el agua se pierda por el camino.
Precisamente, y con el fin de mantener el patrimonio histórico hidráulico del término, con una enorme labor ecológica, dos años atrás la Brigada Forestal del Paisaje Protegido se hizo cargo de la rehabilitación de una canaleta situada en el Pantanet, completando los arreglos de su último tramo la Sociedad de Cazadores de Petrer.
Imágenes de la canaleta del Parat de Catxuli