Estando en una de mis caminatas domingueras, me sorprendió la salida escandalosa desde una rama de un almendro cercano de un pito real. Creo que me asusté casi tanta como él, pero tuve la curiosidad de acercarme a ver el porqué de tanto escándalo y allí descubrí el agujero de su nido. Fue entonces cuando pensé: si otros han podido, yo también. Después de pedir consejo a iniciados y expertos en la materia, me construí una «topera» (hide) y me dispuse con mi cámara a disfrutar del espectáculo (con paciencia,eso sí), que se iba produciendo en las cuatro sesiones que pude dedicarles.
Me di cuenta que los padres no entran en el nido directamente, sino que se posan en alguna rama donde se aseguran que está todo tranquilo y entonces sin dejar de controlar, descienden de espaldas y sólo entonces se dirigen al agujero del nido, donde esperan los pollos ansiosos. La mayoría de las veces era el padre el que les daba de comer y siempre el que limpiaba el nido. Eso sí, a la hora de ahuyentar extraños estaban muy unidos, como ejemplo tuve la ocasión de verlos actuar con una urraca que se posó en un almendro cercano y el espectáculo fue asombroso por lo ruidoso. Por otro lado, los pollos se turnan por estar asomados al exterior, llamando sin descanso cuando la visita paterna se alarga y desapareciendo en el nido a la menor señal de peligro por parte de los padres.
En fin, una gozada que se me ha hecho muy corta.
Enhorabuena Guille,por entrar pisando fuerte,si señor como te dige las fotos son buenisimas y lo que es mejor has hecho un buen trabajo de campo y se de buena tinta que te lo has CURRAO.Enhorabuena tambien por formar parte del equipo,SALUDOS y nos vemos en el monte.
Enhorabuena makina y bienvenido al club.
Sácale punta a esa Nikon que te has comprao, que tenemos mucha faena
y «toperas» que montar.
un saludo.
Las buenísimas fotos de la familia de pitos reales que ahora nos presentas, Guillermo, sabemos que llevan detrás un duro trabajo de campo. Te felicito por ambas cosas, y por supuesto qué yá estás dentro del «club».
Desde la Asociación de Amigos de L ´Avaiol te damos la bienvenida.
Como dice Nestor ! nos veremos en el monte¡
Ayer, escuchaba un canto distinto en el Parque Norte, de Madrid , y mirando y mirando vi con sorpresa a este Pito Real, precioso y muy sorprendido de ver otro tipo de aves diferentes a los loros argentinos. Y podrían hacer algo los ecologistas, o progresista, del ayuntamiento de Madrid con esta invasión de loros. Están en otra cosa
Francisco
Pues yo vivo en Madrid por Ciudad Lineal, y hay uno que se mueve por la Zona de la Quinta de los Molinos, y la verdad que es muy bonito, pero tiene un reclamo que puede ser muy molesto, son 6 tonos agudos a ritmo rápido en ciclos de 10/15 segundos, me ha llegado a despertar de madrugada; puede llegar a ser cansino si se posa cerca de tu casa. Yo me quedo con el canto del Mirlo de mi barrio, que este Carpintero cantando de original no tienen mucho.