Ayer a las cinco de la tarde, en un alto a las buenas temperaturas que nos estaban acompañando estos días, el cielo se ennegreció y durante más o menos un cuarto de hora descargó con furia. Por supuesto, y debido a su brevedad, la cosa no llegó a mayores, pero como en otras ocasiones fue suficiente para ver espectaculares imágenes de avenidas colapsadas por el agua, como en Salinetas, que nos dejó estas imágenes.