Inaugurada hace más de medio año, con un presupuesto de 92.000 euros provenientes del Plan E de 2010, la casa de acogida cedida por el consistorio a Cáritas de la parroquia de san Bartolomé, en la calle Horno Mayor, todavía sigue cerrada a cal y canto, sin ofrecer ningún servicio.
Desde el colectivo humanitario explican que todavía necesitan realizar algunos remates finales a la casa (de más de 100 metros cuadrados y dos plantas), como la instalación de la cocina y los electrodomésticos. «Lo vamos haciendo poco a poco, porque el dinero de todo esto último sale de Cáritas. De momento, ofrecemos servicio en nuestra otra casa de acogida, en la calle Médico Antonio Payá, y esperamos tener operativa esta nueva ubicación a principios de 2013», explica María Asunción Navarro, presidenta de Cáritas San Bartolomé.
Pero lo que no aparece en esta noticia es que, no son 90,000 euros sino 200,000 euros lo que finalmente costó construir esta casa de acogida. Y ¿porque ese desfase o sobre coste? ¿Cuales fueron las causas de este montante que no se han pagado con el Plan E? Pues porque mientras arreglaban esta vivienda se le cayeron- a la empresa y a los técnicos municipales- dos viviendas de la C/ Castillo. Lo que demuestra el mal hacer tanto de la empresa encargada de la obra, como de los técnicos municipales, que supuestamente deben controlar una obra municipal. Eso sí, este desaguisado lo pagamos todos con nuestros impuestos. Y por último ¿donde estaba la necesidad de construir una vivienda si Cáritas tienen ya una en propiedad?