El local de restauración petrerí Sko-bar se ha sumado a la iniciativa cada vez más extendida entre los empresarios de estos negocios de aunar arte y gastronomía en un mismo espacio. Desde el pasado jueves, este conocido bar del centro de Petrer sirve también de escenario de una selección de obras pictóricas del artista local Miguel Davia, piezas que podrán ser contempladas, y también adquiridas, durante todo el verano.
Una «acogedora» sala de exposiciones
La inauguración de esta «sala de exposiciones» estuvo ambientada, además, por un DJ local, en un exitoso intento por estimular a los clientes tres de sus cinco sentidos: oído, vista y gusto. «La idea es tener una excusa para oír música, ver un cuadro y tomar unas copas», indicaba Davia, consciente de que el espacio brindado se presenta como una oportunidad única de que los ciudadanos conozcan a sus `criaturas´ en un ambiente diferente al que reina en las habituales salas de exposiciones. «Las salas se presentan hoy como un lugar aburrido. Éste es un espacio muy bueno para que la gente conozca mis obras», señalaba el artista.
Modelando mundos de fantasía «con la imaginación como instrumento»
Óleos en blanco y negro completan esta exposición