Una
MADRUGADA
estarás
entregándote
a un MORTAL
y llorarás
al recordarme,
y mis LÁGRIMAS,
evaporadas
bajo
la TIERRA;
filtradas
por la madera
y los HUESOS
del OLVIDO,
serán las tuyas.
Ya será tarde.
Los VIVOS
podéis
seguir
adelante,
conociéndoos
a VOSOTROS
mismos.
Los MUERTOS…
los muertos
no quisimos
aprender
y asimilamos
la derrota.
SOMOS
así
por elección
impuesta.
Porque
fuimos
inmortales
y no bastó
con la ETERNIDAD;
las sábanas
que manchábamos
con el flujo
del GOCE
como si
la ROSA llorase
al derramar
la pulpa
del DESEO
incandescente
que la llevó
a dormitar
para SIEMPRE,
enmarcada
al lado
izquierdo
del rectángulo
ROJO
y terminó
por marchitarla.
No bastó
con machacar
piadosamente
los CUERPOS
como
invertebrados;
serpientes
retándose
entre sus
esqueletos
enamorados.
No bastó
con SER
la ceniza
tras la erupción
de la lava.
No bastó
con las miradas
que nos condenaron
a QUERER
seguir
AMANDO.
No bastó
con suicidarnos
en aquél
colchón
BOMBA…
NO bastó
LLORARTE,
mirarte
como NADIE,
JAMÁS,volverá
a mirarte.
Como
el HOMBRE
que te sometió
y sonrío
al verte
aullar
como la LOBA
suplicando
que la NOCHE
no cesase,
ni la LUNA
dejase de iluminar
el orgasmo
sideral
que te hizo
ETERNA.
No bastó…
y el AHORA
es PASADO,
y el PASADO
es
como
el
viento
que SERÁ
brisa
para ser
calma,
para
SER
NADA…