Estamos acostumbrados a encontrarnos con casas de estilo nórdico más bien pequeñas. Suelen tener una habitación, un salón y una mini cocina. Siempre muy bien aprovechado el espacio, eso sí, pero en proporciones muy reducidas.
Pero hoy os voy a enseñar una cocina que me ha robado el corazón. Es grande, luminosa y muy muy bonita. Lo que realmente llama la atención es la chimenea, que junto a los muebles en lineas rectas crean un contraste que hace a la cocina muy especial. Las paredes pintadas en azul pastel la convierten en una cocina muy dulce y agradable.
Esta cocina de estilo nórdico tiene muchas cosas que me gustan; las baldas vistas con cositas chulas, una mesa donde poder desayunar y comer, un mueble auxiliar de estilo clásico y … ¡¡un balcón!! La idea de tener una cocina con un acceso a una terraza o patio donde poder salir a desayunar siempre me ha gustado por eso, en la #casamya se verá cumplido el sueño. Si queréis estar al día de todo el proceso de la reforma integral en la parte derecha del blog tenéis un acceso directo :).
La interiorista Ana Pla Montesinos nos trae cada semana ideas frescas para decorar nuestros hogares y celebraciones atendiendo siempre a las últimas tendencias. Podéis leer sus artículos anteriores en este enlace, o pasar por su blog y disfrutar de muchas más propuestas.