José María “Chema” Vera Villacián, (Madrid,14 de junio de 1965) ha sido nombrado nuevo director general de Intermón Oxfam en substitución de Ariane Arpa que ha finalizado su mandato al frente de la organización.
Vera estudió Química Industrial y, antes de trabajar como ingeniero de proyectos durante tres años, pasó uno como voluntario en el CCAIJO, una organización de los jesuitas de Perú. Ese fue su primer contacto con Intermón Oxfam y con la cooperación al desarrollo, desde una organización local. Inició su carrera profesional dentro de Intermón Oxfam en 1993 como director de la sede de Madrid y luego se hizo cargo del Departamento de Campañas y Estudios. Los últimos seis años ha trabajado en la Secretaría General Iberoamericana coordinando los Programas de Cooperación de las Cumbres Iberoamericanas.Ha cursado masters de cooperación internacional y de desarrollo directivo en IESE.
El Patronato de la organización, que ha nombrado este nuevo responsable de la dirección general, quiere agradecer a Ariane Arpa su gran labor y su dedicación a lo largo de estos años (2005 – 20012).
Nuevos retos y mayor eficacia
El nuevo máximo responsable de la organización afronta su mandato en un contexto difícil tanto a nivel nacional como internacional donde quiere que no se olvide a las personas que sufren la pobreza extrema en los países del Sur. Según Vera “en esta crisis, el Sur es el gran olvidado. La cooperación al desarrollo ha sufrido un varapalo descomunal, con un recorte de casi el 60% (siendo la política pública más recortada de todas), y el efecto que eso tiene se mide en vidas humanas. Hay recursos masivos para rescatar a los bancos pero se laminan los dedicados a la lucha contra la pobreza extrema. Por otro lado, existe una fuerte presión , mediática y política, para que solo se hable de lo que pasa aquí”.
Por otra parte, el nuevo responsable de Intermón Oxfam ha afirmado que “también nos preocupa la pobreza de aquí, y colaboramos con organizaciones que trabajan en este ámbito; además, hay raíces comunes en la pobreza y la desigualdad extrema, se encuentre donde se encuentre. Pero, ciertamente, creemos que no podemos olvidarnos de la pobreza en el Sur, del hambre que sufren millones de personas en el Sahel, de la situación de los campesinos expulsados de sus tierras o de las mujeres que ven vulnerados sus derechos fundamentales”.
Asimismo, Vera quiere seguir mejorando la eficacia del trabajo de la organización a través de la experiencia acumulada por Intermón Oxfam durante los más de 50 años de historia. “Tenemos que escuchar mucho a las personas y a las organizaciones del Sur con las que trabajamos y aprender de nuestra experiencia para que nuestros programas en África y América Latina sean cada vez más efectivos”.
También afirma que “debemos ser muy sensibles a las demandas de la sociedad española. En este momento de descrédito en casi todo, faltan referentes sociales. Y para los próximos años me gustaría que la gente viera que Intermón Oxfam promueve con más intensidad, si cabe, valores como la solidaridad, la justicia y la dignidad humana; que está cerca de las personas más desfavorecidas y que actúa para provocar cambios positivos en sus vidas. Somos una organización que está en la calle y que explica lo que hace de una forma clara y transparente. Una organización, en definitiva, en la que la gente puede creer e ilusionarse”.