Numerosas instituciones, empresas, ayuntamientos y colectivos de muy diverso tipo de toda España se han unido en los últimos meses al proyecto «Tapones para una nueva vida». Los objetivos de este proyecto son ayudar a niños sin recursos a acceder a un tratamiento no reglado en el sistema sanitario mediante el reciclaje de tapones de plástico, concienciando también a la sociedad del reciclaje de tapones de plástico. El proyecto alcanzó gran relevancia mediática con el caso de una niña llamada Aitana, que pudo tratar su dolencia en Boston tras la acción desinteresada -reciclaje de tapón mediante- de trece millones de personas.

La Fundación SEUR gestiona la recogida y transporte de los tapones hasta la planta de reciclaje ACTECO de Ibi, que paga trescientos euros por tonelada. Al proyecto, y con la presencia de Ramón Mayo, presidente de la Fundación y Consejero Delegado de la compañía, se le unirá formalmente mañana la Asamblea Local de Cruz Roja Española en Petrer. Mayo visitará las instalaciones de la institución  humanitaria en la localidad, y con la firma simbólica se oficializará un convenio de colaboración que ya existe de facto, pues con el proyecto ya vienen colaborando diversos centros escolares, establecimientos y particulares de la localidad que precisamente canalizan su solidaridad a través de Cruz Roja Petrer.