En otra semana de lluvias intensas, ayer cedió la estructura de una fachada en la calle de San Hermenegildo. Como consecuencia del desprendimiento resultó dañado un vehículo que había estacionando en la puerta. Los bomberos se desplazaron al lugar en previsión de otras posibles caídas de parte de las paredes de la casa y, a requerimiento de la dueña de la casa contigua, también se revisó esta, comprobando que no había daño en el inmueble.
La fachada de la casa-cueva que ha cedido lleva treinta años deshabitada y era la siguiente que iba a ser objeto de actuación por parte de la empresa que está llevando a cabo el arreglo de las viviendas que sufrieron desprendimientos en 2010.