Bm. Petrer 33 – 26 Universidad Politécnica de Valencia
No fue a la tercera, como dice al refrán, pero sí a la cuarta, a la cuarta fue la vencida. «Teníamos que dar el do de pecho en este partido y lo hemos hecho», razona el entrenador Trigueros, que tras la mala imagen de las dos primeras jornadas anda recalcando a sus jugadores que, como mínimo, «hay que competir». Así es, al equipo le queda horas de esfuerzo por delante, porque el punto de superioridad que tenía la campaña pasada se ha evaporada en esta.
Este partido es muestra de lo afirmado, pese a la diferencia de siete goles final. No fue un partido fácil, y avanzó en absoluta igualdad hasta la mitad de la segunda parte, donde el buen tono físico del Bm. Petrer -también apoyado en sus múltiples rotaciones- marcó la diferencia. A través contragolpes rápidos ante un rival que ya no se replegaba con la misma intensidad, los locales abrieron brecha y tuvieron un final plácido. La grada, bastante llena como es habitual, se lo pasó en grande con la primera victoria del equipo. El reto, ahora, superada la barrera psicológica de la primera victoria en la división, es «seguir en este nivel». Este sábado a las seis y media el equipo viaja hasta Mislata para afrontar una difícil salida, en la que «tendremos opciones si jugamos como sabemos».