En los últimos días el Ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, nos anunciaba otro recorte, un recorte de gran contenido ideológico como todos: “no se podrá abortar por malformación del feto”. Desde luego nada sorprendente si echamos un vistazo general a las políticas sociales que está desarrollando este gobierno.
Nos podemos preguntar y ¿por qué ahora? Bueno, a mi entender, esto no tiene nada que ver con la situación económica que vive en la actualidad nuestro país. Pensando y recordando el Partido Popular en el año 2010 ya presentó un recurso contra varios preceptos de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva, vigente en la actualidad, ante el Tribunal Constitucional, aunque éste aún no se ha pronunciado. En definitiva hace tiempo que le van dando vueltas al asunto y ahora toca, así que, insisto, nada sorprendentes las declaraciones del “lúcido Ministro”
Desde luego y al margen de lo que esta “idea revolucionaria” va a suponer para nuestras mujeres, que las pondrá en situaciones vividas en los peores momentos de falta de libertades de este país, lo que sí que no deja de sorprenderme es la manía que tiene la derecha en decirnos constantemente cómo hemos de vivir, cómo hemos de pensar y, si nos descuidamos un poco, con quién debemos vivir.
Hablo de esa fijación por introducir el concepto de la ética en la política general de la sociedad, traspasando siempre los umbrales de la libertad más íntima de las personas y anulando la capacidad y la libertad de poder optar, de poder elegir. Yo no sé si es manía o fijación, pero siempre terminan haciéndolo.
Cuando se trata de temas en los cuales la mujer está directamente implicada ahí es donde siempre buscan la manera de anularla. El Ministro a pesar de sus “lucidas” palabras jamás podrá sentir lo que siente una mujer cuando toma decisiones tan importantes como es interrumpir un embarazo, sea por el motivo que sea. Pero sin embargo se atreve a penalizarnos.
No voy a detenerme en concretar qué supuestos son menos penalizables respecto a otros y menos aún lo voy a hacer poniéndome bajo la ética a la que tanto alude. Pero sí le digo que está condenando a muchas mujeres a la clandestinidad y a la inseguridad sanitaria y jurídica. También le digo que este gobierno se ha empeñado en gobernar contra las mujeres, cortando derechos y libertades que tanto nos han costado conseguir.
Los ataques de este gobierno a la mujer son constantes. No valora el trabajo y la presencia de la mujer en nuestra sociedad. No cree en la igualdad desde el respeto a la diferencia. No cree en la universalización del cuidado sin diferencias de género. Pero sí cree que es posible criminalizar el aborto como si fuera un delito cualquiera y sí cree en una reforma cuyo fondo es claramente ideológico y rancio.
Yo le recuerdo al “lucido Ministro” que la política también es empatía y que efectivamente su ética me recuerda y me reafirma en el convencimiento de que no son lo mismo las políticas de derechas que las de izquierdas y vivencialmente tampoco. Seguiremos atentas y muy de cerca estos nuevos ataques. Pero señor Gallardón déjeme que le diga que puede hablar con palabras grandilocuentes llenas de ética pero la realidad está llena de matices. No lo olvide, hace tiempo que en este país las mujeres comenzaron a decidir, a poder elegir. No nos hable a nosotras de ética.
Toñi Serna Serrano – Secretaria Provincial de Igualdad (PSOE)
Sembla evident que la reforma té dos objectius. Per una banda assegurar recolzaments de l’extrema dreta antiavortament de cara a futures batalles pel lideratge del PP. Per altra el desviament d’intervencions a la privada, a l’estranger i a clíniques en ocasions sense garanties sanitàries suficients.