Bm. Petrer 30-24 Salesianos de Alicante

Dicen que los grandes equipos son los que ganan cuando juegan mal; de ser cierto, el Bm. Petrer tiene  hechuras de gran equipo. Firmó este fin de semana su partido más flojo de los últimos meses, con un juego espeso y sin frescura mental para decidir con acierto. Tampoco se enfrentaba a un mal rival, de hecho el Salesianos de Alicante era uno de los favoritos para estar arriba en las jornadas decisivas, aunque una mala racha de resultados le ha apartado de la lucha por el ascenso. A pesar de todo ello, el equipo de Pellín se impuso con claridad, nunca temió por el marcador y supo marcar la diferencia cuando se lo propuso.

Y es que pocos equipos rivales aguantar la intensidad física que es capaz de imprimir al juego el equipo petrerense, que cuenta con una plantilla amplia y muy compensada, donde todo el mundo tiene oportunidades y se siente importante. Ante el equipo alicantino, fue otra oportunidad de hacer rotar a todos los jugadores y seguir afinando tácticas de juego. La primera parte, jugada como decimos con intermitencias y sobre todo con poca puntería, se cerró con 16-12, pero cuando de verdad se apagaron las luces para el equipo local fue al inicio de la segunda mitad, en el que, a los diez minutos de la misma, el rival alicantino fue capaz de ponerse a un gol de diferencia. Aquí llegó la reacción local y en los diez minutos siguientes abrieron una brecha de ocho goles, ya insalvable para el conjunto visitante.

El Bm. Petrer, líder, podría clasificarse matemáticamente para el playoff de ascenso en la próxima jornada (dependiendo de los resultados de sus perseguidores) y en todo caso lo será si gana dos de los tres partidos que le quedan. El primero de ellos, este sábado ante el Maristas a las cinco y media de la tarde, un rival competente pero en todo caso muy lejos de los de Pellín.