San Juan 0 – 2 Petrerense
El partido, jugado en la tarde del sábado, evidenció los problemas de juego y definición del equipo de Campello, pero al menos dejó una victoria balsámica que viene muy bien para tapar urgencias y de cara a coger moral en la segunda vuelta, que se inició con este partido.
El partido no tuvo mucha historia: en la primera parte, y aunque un poco a “trancas y barrancas”, el Petrerense dominó el encuentro, pero sin claridad para finalizar las jugadas. No obstante, la endeblez del rival, colista por méritos propios de la competición, hacía presagiar del gol una cuestión de tiempo. Finalmente llegó en el 41, cuando tras una internada por la banda de Mariano pone el balón en el área y, tras varios rechaces, le cae el balón a Coti, quien, de puntera, deshace la igualada. Tan solo tres minutos después llegó el segundo, en la mejor jugada del partido: gran pase interior de Claudio a Coti, quien encara al portero para hacer después el pase de la muerte a Miguelico, que golea a puerta vacía.
La segunda parte, que sonaba a puro trámite, se animó por la incapacidad del Petrerense de contemporizar el balón, y el partido vivió muchas fases locas, con el San Juan volcado en el campo rival (aunque sin apenas crear peligro) y con los hombres de Campello con muchos metros para correr en las contras. Pudo hacer algún gol más, precisamente, con situaciones de cuatro para tres y tres para dos, pero no llegaron. La única jugada de peligro del San Juan llegó en el minuto 84, y acabó más que en un probable penalti de Plaza al delantero que el árbitro no pitó.
“Hemos jugado regular tirando a mal”, reflexionaba Campello, “pero necesitábamos los tres puntos y nos los llevamos. Espero que sirva para coger moral en esta segunda vuelta, que la necesitamos”. El Petrerense, octavo, se enfrenta la semana que viene al Orihuela B, que por su condición de filial puede presentar diferente potencial en el Barxell, el domingo a las doce de la mañana.