Elda y calzado son dos palabras enlazadas por una larga tradición de profesionales locales dedicados a este sector. Pero de entre estos profesionales hay una joven que, sin perder sus raíces zapateras artesanales, ha querido mostrar y demostrar que su localidad es «más que calzado»; se trata de Ana Belén Ferriz, que hace dos años creó su firma de alta bisutería y joyería, ‘Cucadas de Ana’, con la que pretendía crear un «complemento innovador» a la industria del calzado, además de trasladar el glamour de sus diseños a la mujer para que se sintiera «única y exclusiva».
Un objetivo que ve cumplido cada vez que en su showroom los clientes le dicen: «Ana, es que esto no se ve en ningún lado». Palabras que dan fe de la buena acogida de la iniciativa de esta emprendedora, que ha engarzado su buen hacer y su cultura zapatera inculcada desde la cuna con su gusto por la moda. Y lo hace con una receta en la que los ingredientes fundamentales son los exquisitos cristales de Swarovski que utiliza en sus creaciones, acompañados de piezas de plata de ley o con recubrimiento galvánico, todo ello sazonado con mimo, esfuerzo y humildad ‘a granel’. «No hay que perder la ilusión, ni ponerse metas demasiado altas, lo importante es trabajar día a día», comenta. El resultado, piezas hechas una a una y personalizadas para cada cliente. “Me piden que la piedra sea más grande o más pequeña, que alargue o acorte el collar…”, explica Ferriz.
Y así, paso a paso, ha conseguido abrir camino a un nuevo nicho de mercado en el que marca la diferencia. No en vano, para presentar sus últimas colecciones, Ana Belén organizó a mediados de diciembre una ‘Fashion Night Jewellery’, una noche «mágica», con el Museo del Calzado de Elda como escenario, donde moda, glamour, compras y solidaridad se dieron cita en un evento único hasta ahora en la provincia, con sus joyas y la pasarela como protagonistas. Sin embargo, ‘Cucadas de Ana’ ya sabía lo que es estar en lo más alto de la pasarela, ya que de la mano del diseñador y paisano Juan Vidal ha desfilado en dos ocasiones en la Valencia Fashion Week.
Con estos avales, la firma de Ana Ferriz ha crecido en esto tiempo hasta lograr introducirse en diez puntos de venta en la provincia y Murcia, además de en la tienda de Ángela Mazza en Madrid. Así, su media de ventas es de unas 400 piezas al mes, que en estas fechas navideñas llega casi a duplicarse. «La gente ya busca mi marca, y eso es fantástico», afirma la diseñadora que, sin dejar de tener los pies en la tierra, quiere subir el siguiente escalón con la creación de franquicias de ‘Cucadas de Ana’; todo un reto que se propone superar, pero a largo plazo. Y mientras, ya está inmersa en las próximas colecciones que sacará para la temporada primavera-verano.
De todo esto y más es de lo que hablamos con la diseñadora en su showroom de la calle Rosales donde nos recibió con una sonrisa igual de cautivadora que sus joyas.
Que iniciativa más cuca, así si que se puede superar la crisis, la gente joven tiene que coger las riendas y tirar para adelante, enhorabuena por el reportaje.