El partido acabó en un empate sin goles, lo que a priori suena a triste bagaje de este prometedor enfrentamiento, pero que en realidad escondió un entretenido partido entre dos equipos parejos que pudo decantarse para el lado de cualquiera. En la primera parte, el equipo local controló el juego, con una buena circulación de balón y con bastantes llegadas al área, pero faltó calidad en el último pase y precisión en el remate. El Callosa apenas inquietó en los primeros cuarenta y cinco minutos, pero se cerró bien atrás y el Petrerense no pudo con el entramado defensivo. Sin duda, el entrenador Campello lamentó no poder contar con Claudio, el delantero más talentoso del equipo y del que se espera su regreso para la próxima jornada.

En la segunda parte cambiaron las tornas y el conjunto visitante hizo valer su superior condición física para progresivamente ir encerrando a los rojiblancos. No obstante, los locales todavía tenían fuerzas para realizar rápidas contras, llegando a los diez minutos finales con el encuentro roto y con alternativas para los dos equipos. Fueron unos minutos de infarto donde el gol no llegó prácticamente de milagro; al final, reparto justo de puntos que deja a los dos equipos en la zona media de la tabla con 5 puntos cada uno tras tres jornadas disputadas. Sobre el bajón físico del equipo, Campello ha comentado que se debe a “la descompensación de entrenamientos que hay en la plantilla, pues hay jugadores que se incorporaron en septiembre y todavía no están al cien por cien, pero tardaremos poco en alcanzar el estado de forma ideal”.

El próximo partido enfrentará a los rojiblancos al recién ascendido equipo aspense de La Coca, un rival “agresivo y peleón, pero al que tenemos que ganar. Ahora lo más importante, en este tramo inicial del campeonato, es puntuar lo máximo posible”, ha asegurado Campello. El encuentro, en campo del rival, el domingo a las 17 horas.