Cuando todavía queda una prueba por disputarse, la de Talavera de la Reina, el petrerense Álvaro Lozano ya se ha hecho acreedor del campeonato Nacional de MX Élite Cepsa. Ha sido este pasado fin de semana, en el circuito extremeño de Las Arenas y ante nada menos que 5.000 aficionados, cuando Lozano ha sellado su magnífica temporada, que lo corona como el mejor de España en la categoría reina de motocross del país.
Con todo a favor, después del colchón de puntos que llevaba, Lozano se ha tomado con mucha serenidad y filosofía esta penúltima prueba del campeonato, siendo cuarto en la primera manga y quinto en la segunda, exactamente la posición que necesitaba para matemáticamente alzarse con el triunfo final en el campeonato. Radiante de felicidad, el piloto de Yamaha Ausio ha conseguido así el triunfo más importante de su carrera, después de que en 2004 también se proclamara campeón nacional, pero en ese caso de MX-1.
Una gran regularidad
El motorista petrerense, al que han respetado las lesiones, ha hecho gala de una gran regularidad en la competición, no bajándose del podio excepto en este fin de semana, sumando así un tercer puesto, tres segundos y dos victorias. Estas dos victorias, en las carreras precedentes a su triunfo matemático, concretamente en Alhama de Murcia y La Bañeza (León), han sido las que le han catapultado hasta el éxito final, sumándose además el hecho de que sus máximos competidores, J. Barragán (subcampeón con Kawasaki) y C.Campano (Yamaha) estuvieron ausentes. Ello no debe restar mérito a la gran temporada de Lozano, que con ellos enfrente (Barragán está considerado el piloto más rápido del mundo y Campano acaba de ganar el Campeonato del Mundo en la categoría MX3) ha dado muestras de su clase y fiabilidad.
Este triunfo supone un gran espaldarazo para el corredor, que no pudo disputar el Campeontao del Mundo como era su pretensión, y que después de muchos años en el mundillo del motocross se ha rearmado de confianza para la temporada que viene contar con todo el apoyo de la marca y los patrocinadores para, esta vez sí, competir con los mejores del globo.