La falta de entendimiento entre administraciones es más que evidente y se hace visible permanentemente en todos y cada uno de los proyectos que exigen la colaboración de unas administraciones con otras y de signos diferentes. El asunto llega a límites insospechados y creemos que todavía no lo hemos visto todo.
El ejemplo más significativo ha sido la puesta en funcionamiento de la Estación de Ferrocarril Elda-Petrer donde, al parecer, rompiendo todas las normas protocolarias establecidas, nuestro Alcalde y la Alcaldesa de Elda asisten a la inauguración con premeditación, alevosía y a pleno día sin contar con nadie, ni siquiera con quienes tuvieron la iniciativa y realizaron las reivindicaciones necesarias ante las diferentes administraciones locales, autonómicas y nacionales y que durante mucho tiempo han estado trabajando para sacar adelante este proyecto, como es el caso de AMFI y otros colectivos de discapacitados que fueron arropados por los ayuntamientos de la Comarca.
Nuestro Alcalde ha ignorando también al resto de políticos que representan a más de la mitad de los ciudadanos de Petrer, apareciendo acompañado por su gran amiga y Alcaldesa de Elda, Adela Pedrosa. Con la prepotencia que les caracteriza a ambos, un buen día deciden la inauguración de la remodelación de la Estación Elda-Petrer sin contar con nadie. Se apropian así de un proyecto que ni les corresponde ni tienen competencias para el mismo pero deciden por su cuenta y riesgo que esa foto es suya, invitando a sus “jefes”, llámese diputados autonómicos (que tampoco tienen competencia en esta materia) y a sus tropas de a pie haciendo gala de su poderío, uso de la Policía Local y todo un séquito de acólitos. Hacen suyo el proyecto, ocupan la estación inaugurándola sin más. El resto, sorprendidos por la acción sólo nos queda ser observadores del esperpento y pensar que todavía no lo hemos visto todo. Que con el tiempo seguro que tal “egolatría” será superada por otras mayores.
La falta de entendimiento queda patente cuando al día siguiente y por parte de la Subdelegada del Gobierno, en nombre del Gobierno de España y con la Asistencia de la Secretaria de Infraestructuras, que son quienes verdaderamente tienen las competencias sobre los ferrocarriles de nuestro país y del transporte por vía férrea, y a través de ADIF son quienes han gestionado y ejecutado dicho proyecto, por lo que nuestra sorpresa es mayor al comprobar que la inauguración del Alcalde y Alcaldesa fue toda una pantomima y que al parecer estos no saben estar a la altura de los acontecimientos y por ello no merecen estar donde están, pese a tener el apoyo legítimo de sus concejales en los ayuntamientos.
Esperamos que entre todos exista alguien sensato y les diga que esa actitud no es coherente, que están para servir y no para servirse, que el protagonismo y el respeto hay que ganarlo en el día a día con gestos, tareas, esfuerzo y trabajo acompañados de una pequeña dosis de ética propia de un cargo público y que por encima de todo está el respeto a ellos mismos, a quienes representan y a las instituciones que presiden, que la humildad tiene un valor y la prepotencia o falsa humildad perjudica a sus pueblos y a ellos mismos.
Solicitamos de nuestro Alcalde las disculpas y rectificaciones oportunas para con los vecinos de Petrer con el Ministerio de Infraestructuras y con él mismo porque después de lo acontecido es si no para avergonzarse, al menos para sonrojarse.
En el PP todos son iguales y si no lo son se hacén. Vaya tela señor Pascual, en poco tiempo a dejado de ser el «bon chic de Petrer que todo lo arreglaría» a parecerse cada día más a la majestuosa Alcaldesa de Elda. Que pena.
dime con quien vas y te diré quien eres
no te juntes con Adela, te están comparando y hay comparaciones que son odiosas
Increible pero cierto: Pascual Díaz practica la soberbia como su homónima Pedrosa. La pena es que va de segundón. Debe tener presente que hay trenes en vía muerta que no llevan a ninguna parte y el PP de Petrer parece que se ha subido al tren que no toca. O tal vez Pascual Díaz esté empezando a cambiar de tren, ya que la locomotora Ripoll ha encallado debe buscar otro tren que le siga llevando a cuestas.
Pues sí, ya vemos que ellos se lo guisan y ellos se lo comen. Incluso se comen aquello que no han cocinado ellos. Practican la exclusión política -algo propio del PP- y también la exclusión social que estamos viendo claramente en Petrer con la política de Pascual Díaz favorable a unos barrios de la oligarquía y rácana con los barrios obreros.